La parodia hecha política

Días pasados los medios, pauta mediante, cubrían una supuesta protesta de un «influencer» que dejó en la vereda del Congreso de la Nación 256 palas con una nota dirigida a los legisladores de nuestro bendito país, a modo de visibilizar las ausencias reiteradas de los legisladores que nos cuestan millones a los argentinos y no hacen NADA por mejorar la situación general de la población.

Hasta aquí, el reclamo parece tener coherencia y ser conteste con lo que piensan muchos argentinos sobre el funcionamiento que tiene el Congreso de la Nación que se destaca más por escándalos que por legislar en beneficio del pueblo.

Resulta que primero, guste o no, el dejar esas palas en la vereda del Congreso requiere de mínima la complicad política del Gobierno de la Ciudad, responsable del orden y el cuidado del recinto puertas afuera, este tipo de acciones no son permitidas en ningún país del mundo y quien lo hace termina enfrentando cargos, tenga o no la razón en el motivo por el que protesta.

Pero la cosa se agrava cuando se supo que el responsable de esas palas, de pésima calidad si se las quiso usar como modelo de trabajo, fueron enviadas por Mauro Stendel, un seudo empresario «millonario» que cuenta una historia incomprobable de como con solo 500 dólares llegó a los EEUU y se hizo millonario mientras trabajaba de albañil, aunque el prefiere contar que era remodelista, aunque nunca estudio nada que tenga que ver con el diseño o la construcción que lo avalen como algo más que un simple albañil.

Según su relato de vivir en un auto prestado, pasó en 2 años a ser millonario, un hermoso cuento del sueño americano cumplido, justo cuando en 2018 los EEUU tenían los niveles de indigencia y desempleo más altos de su historia un homeless que omite contar bajo que condición ingreso a EEUU se transforma en un ejemplo.

Más curioso es que este joven que dicen vive en una mansión en Houston, con negocios en sudamérica se interese por nuestros legisladores, tal así que envío 256 palas en lugar de 257, quien quedó fuera del reclamo de que trabajen es justamente Javier Milei, sí el diputado con más ausencias, entonces, me permito dudar de que este invento llamado Mauro Stendel haya pertenecido a los servicios de Inteligencia porque es evidente que no la tiene o le falla la información.

Comparto el reclamo de que son unos vagos, caros e impresentables, pero si te colocas del lado del más ausente sos un chiste.

Así que no te comas el verso de estos inventos improbables de héroes que fueron comandos en misiones tan secretas que no las pueden mostrar ni comentar, si no fuera por su físico poco parecido al de los comandos parecería una remake de Zohan que llegó a los EEUU con un sueño de ser peluquero termina millonario por sus habilidades, muy predecible lo de ustedes muchachos.

Por Marcelo Ricardo Hawrylciw

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *