El fenómeno de los pedófilos que actúan en Internet es imparable: en el último año se investigaron más de 800 casos, con situaciones de niños de 7 años obligados a adoptar posturas sexuales.
Sólo en la Ciudad de Buenos Aires la Justicia inicia una causa por pornografía infantil en Internet cada diez horas. El fenómeno delictivo es imparable: los pedófilos actúan con la impunidad que les da la web por eso las autoridades piden a los padres extremar los cuidados y denunciar a los perversos sexuales que buscan aprovecharse de los menores.
De acuerdo a las estadísticas del Ministerio Público Fiscal porteño (MPF), en el último año se comenzaron a investigar 861 casos de pornografía infantil, como por ejemplo niños de 7 años obligados a adoptar posturas «sexuales» mientras son filmados.
Son los expedientes que se tramitan en la Fiscalía Especializada en Delitos Informáticos que en el último año registraron un incremento del 520 por ciento, lo que representa el inicio de una nueva causa cada diez horas.
Las imágenes pornográficas de menores encontraron en la web un canal de difusión ágil y visible. Las causas judiciales avanzan a medida que son detectados estos pervertidos.
Las fiscalías porteñas se nutren de información de la ONG norteamericana NCMEC, que accede a una plataforma centralizada donde los proveedores de internet reportan actividades sospechosas relacionadas a la explotación sexual de los chicos en todo el mundo.
La abogada Daniela Dupuy, titular de la fiscalía especializada, explicó, en declaraciones periodísticas, que las causas tramitadas ‘están en etapa de investigación y algunos se resolvieron con suspensión de juicio a prueba. Esto se da en aquellos casos donde el imputado asume los cargos y acepta la probation’.
Los especialistas coinciden en que es fundamental denunciar a los pedófilos virtuales. Los porteños pueden elegir la vía presencial, telefónica o digital para dejar asentados detalles de los episodios que quieran acercar a la Justicia.
Por su parte, el fiscal General de la Ciudad de Buenos Aires, Martín Ocampo, enfatizó que «nuestra casa ya no es un lugar cerrado, a través de internet se abre una gran ventana y los padres tenemos que estar atentos al cuidado de nuestros hijos».
El funcionario remarcó que en 2012 se creó esta unidad de investigación y que desde entonces cada vez se suman más causas gracias a las denuncias de las personas y a la colaboración de empresas como Facebook. Técnicos de la red social les suministran datos sobre grupos de pornografía infantil o perfiles en los que se realice grooming (acoso por internet de un adulto a un menor).
En este sentido, Ocampo detalló que hay dos perfiles de autores que encabezan estos delitos informáticos: ‘las organizaciones internacionales que lucran por esto’ y aquellos sujetos que ‘tienen desviaciones».
La Ley 26.388 penaliza con hasta 4 años de cárcel al que produzca o divulgue material pornográfico de menores pero no prevé sanción punitiva para el consumo del material. Por lo tanto, para el fiscal Ocampo es fundamental «saber quiénes son las personas con las que hablan nuestros hijos en términos reales»