La entidad que agrupa a los industriales de la alimentación expresó esta noche su grave preocupación por el conflicto desatado en la planta que la empresa Kraft tiene en General Pacheco, que incluyó la toma de las instalaciones por parte de los trabajadores.

A través de un comunicado, la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (COPAL) calificó la protesta como «una clara violación de la libertad de trabajo de los operarios que se desempeñan en el mismo, afectando también el derecho constitucional a ejercer toda industria lícita y la libertad de tránsito de la sociedad toda».

COPAL, en simultáneo, exhortó a dirimir la disputa «ante la autoridad pública y los tribunales competentes a los que acudió oportunamente la empresa, y no el violento accionar de este pequeño grupo de personas que ha producido daños personales y materiales, tratando de imponer su voluntad por las vías de hecho y situarse más allá de las leyes vigentes».

Esta mañana, los trabajadores de la ex Terrabusi realizaron un corte de calles en la zona de Retiro solicitando la reincorporación de los 150 operarios despedidos.

En el texto, la entidad remarcó que «el desarrollo y crecimiento que nuestra Nación necesita no ha sido ni será el fruto de actitudes y comportamientos ilegales, que violan el Estado de Derecho y constituyen un perjuicio para los propios trabajadores, las empresas y la sociedad en su conjunto, por lo cual urge a las autoridades competentes hacer cesar el estado de ocupación ilegítimo para que pueda restablecerse el trabajo y la producción en la citada planta».