En un clima de tensión en la apertura de sesiones del HCD de Lanús, familiares y amigos de los concurrentes al comedor «Los Cartoneritos» se hicieron presentes para escrachar al intendente Néstor Grindetti y al secretario de seguridad del municipio Diego Kravetz.
Mientras las víctimas gritaban «con los pibes, no», el macrismo respondía con cantos de «sí, se puede».
Un clima de tensión se vivió este lunes en el Concejo Deliberante de Lanús cuando el intendente, Néstor Grindetti, fue a dar su discurso de apertura de sesiones ordinarias y fue escrachado por un grupo de familiares de las víctimas de la represión policial que tuvo lugar la semana pasada en el comedor Los Cartoneritos.
«Háganse cargo», decían los carteles que llevaban los manifestantes, dirigidos a Grindetti y a su secretario de Seguridad, Diego Kravetz. La frase era una cita sarcástica a la ya célebre expresión que usó Marcos Peña para confrontar con el kirchnerismo.
El súmmum de tensión se dio cuando los familiares de las víctimas interrumpieron el discurso protocolar del intendente para gritar: «Con los pibes, no». La respuesta llegó de parte de los militantes de Cambiemos, que cantaban eufóricos: «Sí, se puede».
Según confiaron fuentes de la oposición local los partidarios de Cambiemos llegaron al recinto en un micro de la Secretaría de Desarrollo Social, que quedó estacionado en la entrada del Concejo. Es que Grindetti temía que hubiera protestas y se habría atajado llevando militantes -que Juan Grabois calificó como «punteros» del intendente- para contrarrestar los posibles escraches, recurso que ya utilizó el intendente el día que hubo golpes e intercambios de insultos entre integrantes de la barra de Lanús y vecinos de un asentamiento por los cortes de luz.
