El asesino que cometió la “Masacre de Flores” podría quedar en libertad: las quejas del único sobreviviente

La Justicia tomó esa decisión sobre Álvarez González y solicitó al Servicio Penitenciario Federal la elaboración de una serie de informes socioambientales para evaluar si el recluso está en condiciones de ser excarcelado.

A 29 años de la denominada “Masacre de Flores”, en la que murieron cuatro integrantes de una misma familia y un amigo de las víctimas durante el incendio intencional de una casa, Fructuoso Álvarez González, el condenado por los crímenes, podría quedar en libertad.

La posibilidad se reabre a partir de un recurso presentado en la Justicia por la defensa del condenado a perpetua, en el que piden que se le otorgue la libertad condicional, luego de cumplir más de dos décadas tras las rejas.

Ante esa situación, la jueza de Nacional de Ejecución Penal 1, María Jimena Monsalve, ordenó que Álvarez González sea incorporado en un programa de “prelibertad” y solicitó al Servicio Penitenciario Federal (SPF) la elaboración de una serie de informes socioambientales para evaluar si el recluso está en condiciones de ser excarcelado.

“Me puse muy mal cuando me enteré. La Justicia le da la posibilidad de pedir su libertad cada 6 meses y esto lo viene haciendo hace 11 años. Hasta ahora los pedidos salieron a mi favor, pero pasar todos los años por esta instancia es destructivo”, afirmó Matías Bagnato, el único sobreviviente de la masacre, en diálogo con Télam.

A diferencia de anteriores años en los que el asesino pidió su libertad, en esta ocasión la jueza de Ejecución es la mencionada Monsalve, que reemplazó a su par José Pérez Arias, quien le había negado la excarcelación al autor de la “Masacre de Flores” en reiteradas oportunidades. Al respecto, Bagnato señaló: “No la conozco. Voy a esperar a que estén los estudios del penal y el interdisciplinario. Luego de eso le pediré una audiencia para hablar con ella”.

A su vez, el sobreviviente explicó su temor a que Álvarez González recupere la libertad ya que “los informes previos dicen que él tiene rasgos psicopáticos” y que “no está arrepentido de lo que hizo”. “Si veía que los informes le salían bien, por lo menos estaría más tranquilo. Pero al leer los informes que yo leí, no puedo estarlo. Él manifestó que tiene ira hacia mi persona. Después de vivir lo que yo viví, lo creo capaz de cualquier cosa”, manifestó Matías, que anticipó: “Si él sale, voy a tener que tener custodia policial las 24 horas y es un garrón. Siento que yo voy pasar a estar preso y él libre”.

En ese contexto, Bagnato expresó su disconformidad con la Justicia, al permitir que el condenado pueda pedir su libertad condicional cada seis meses. “Me da bronca que se permita eso. Yo no entiendo como un psicópata pueda cambiar en 6 meses su situación. No cambió en 29 y va a cambiar ahora… Siento que es de nunca acabar. Acá matar una persona y matar diez es lo mismo. Ningún sentido común encuadra con lo que piensa cualquier ciudadano en nuestro país. Es de locos”, subrayó.

El planteo de la defensa de Álvarez González

Por otro lado, la abogada que representa a Fructuoso Álvarez González, Patricia Croitoru, indicó que su defendido “está pasado del término” que indica su condena y confirmó que sigue alojado en el Complejo Federal de Ezeiza 1.

A su vez, la letrada hizo mención al pedido de fijación de pena de su asistido, que fue rechazado en junio del año pasado por la Cámara de Casación Penal. “En el caso de Fructuoso, tiene la posibilidad de salir con condicional ya que no es reincidente. Con ese argumento, los camaristas decidieron no fijar su pena”, señaló.

A su vez, Croitoru sostuvo que “es muy difícil” que la pena de su cliente pueda ser fijada debido a “la mediatización” que tuvo el caso. “Es muy probable que haya que llegar a tribunales internacionales. Participé de casos en los que un condenado a perpetua con reincidencia tenía fijada la pena. En un caso así, con una pena menos gravosa, debería pasar lo mismo”, justificó la letrada.

La Masacre de Flores

La tragedia que terminó con la vida de casi una familia completa ocurrió el 17 de febrero de 1994 cuando se inició un incendio en una casa de la calle Baldomero Fernández Moreno y Pumacahua, en el barrio de Flores.

Las víctimas fatales fueron José Bagnato, de 42 años; su esposa Alicia Plaza, de 40; sus hijos Fernando (14) y Alejandro (9) y Nicolás Borda (11), un amigo del menor de ellos que esa noche se habí­­a quedado a dormir.

Los investigadores determinaron que el incendio había sido originado de manera intencional por Álvarez González, exsocio de José Bagnato, quien arrojó dos bidones con combustible y encendió el fuego.

El imputado fue condenado a prisión perpetua en 1995, pero por tener su ciudadanía española, en 2004 fue extraditado a ese país para terminar de cumplir su condena. En España lo liberaron y fue recapturado en la Argentina en 2011, después de amenazar de muerte a Bagnato.

En una entrevista con TN años atrás, el único sobreviviente del múltiple homicida expresó: “En su momento fue declarado culpable y la justicia dictaminó prisión perpetua que desde mi punto de vista es una mentira. La perpetua es solo para los familiares y víctimas porque, en medio de tanto dolor, con mi abuela entendimos que él no salía más, pero no fue así”.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *