El Secretariado Nacional de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE), liderado por José Voytenco, repudió enérgicamente la absurda negativa de las entidades de la Mesa de Enlace a otorgar un justificado aumento salarial a los trabajadores y trabajadoras rurales.
“Con dilaciones y chicanas, semana a semana los representantes de las cuatro entidades que componen la Mesa de Enlace privan a los cientos de miles de trabajadores rurales de poder poner el pan en su mesa, de vivir una vida acorde al esfuerzo que realizan”, sostuvieron desde el gremio. Y agregaron: “En un año en el que tienen ganancias extraordinarias por el alza de los precios internacionales producto de la guerra, los empleadores juegan a empobrecernos como trabajadores”.
Además, desde el Sindicato manifestaron que incluso, hasta han buscado desprestigiar a la organización, cuando la Justicia ya ha rubricado al Secretariado Nacional con la Certificación de Autoridades y, además, confirmado la titularidad de la UATRE por sobre las demás organizaciones en la Dirección de Asociaciones Sindicales.
“Queremos ser muy claros: que esos representantes y Abel Guerrieri, representante de la Sociedad Rural en la Comisión Nacional de Trabajo Agrario, no se confundan. Hasta ahora, la UATRE y su Secretario General José Voytenco, siempre apostaron al diálogo como forma de resolver las diferencias y los conflictos. Pero no somos mansos, no se equivoquen”, expresaron y afirmaron: “Defenderemos con todas nuestras fuerzas los derechos y hasta las últimas consecuencias, los salarios de cada uno de los compañeros y compañeras que día a día trabajan en los campos de la Argentina”.
Por último, sostuvieron que “no hay más tiempo, no puede haber más dilataciones. No aceptaremos ser pobres mientras ellos facturan en dólares lo que producen gracias a nuestro esfuerzo. Si tenemos que paralizar la producción o salir a las rutas lo vamos a hacer”.
La UATRE representa a 560 mil afiliados y tiene presencia federal con 1070 puntos de atención distribuidos desde Ushuaia a La Quiaca.