En Palermo, el Tenis Club Argentino, ubicado en la calle Av. Valetín Alsina 4375 de CABA, a pocos metros del conocido Planetario, han dispuesto utilizar la misma como una extensión del predio para que sus socios lo utilicen como estacionamiento privado, para ello aprovecharon el boulevar existente y señalizaron la calle para estacionar a 45°, además de colocar una señalización de tránsito «trucha» de contramano con el fin de organizar el ingreso.
Para el cuidado de la playa ilegal, colocaron dos garitas verdes con personal de seguridad que sin tener facultades para reprender a un conductor, actúan como agentes de tránsito tratando de mala manera a quienes no pertenecen al club y pretendan estacionar en un espacio que a la fecha es público.
Todo esto hubiera pasado desapercibido si no fuera por el hecho de que el día 14 de diciembre a las 22:00 hs. un grupo de autos, convocó a un encuentro para finalizar el año y compartir un rato de música y que sus miembros se conozcan personalmente además de aprovechar para fotografiar sus autos en un punto de encuentro cercano a todos.
Ese día concurrí a cubrir el evento, ya que muchos de estos se han vuelto solidarios y brindan asistencia a comedores o ONG que necesiten asistencia.
Un personal de seguridad privada insultaba a los que pretendían estacionar en la playa, incluso golpeaba las puertas de algunos autos y amenazaba con llamar a la policía para que los saque del lugar.
Cuando la cantidad de autos desbordó al agresivo empleado, aparecieron dos patrulleros de la Policía de la Ciudad que obedeciendo las órdenes del vigilados, un civil, comenzaron a anotar las patentes de los autos a modo de intimidación y al no lograr que los jovenes se retiren comenzaron a pedir identificaciones y documentación, algo que no está mal si no fuera por el hecho de que aún teniendo todo en regla invitaban al identificado a retirarse del lugar por ser «PROPIEDAD PRIVADA», es por demás sospechoso y hasta puede existir la comisión de delitos de acción pública si partimos del hecho que el estacionamiento del club no es propiedad privada, por el contrario es parte de una calle a la fecha pública, es decir, mal puede la policía actuar como auxiliar de quien está cometiendo de mínima una contravención al ocupar un espacio público que para peor, es una calle.
También es extraño que los policías tan reacios a acceder a los pedidos de los ciudadanos cuando son requeridos, poniendo siempre como excusas cuestiones legales, en este caso hagan de fiscal y juez, en un claro abuso de autoridad.
El Tenis Club Argentino, si nos remitimos al Código Penal Argentino, habría incurrido en la posible comisión de los delitos tipificados en los Art. 45 y 181 del C.P
La certeza de que el club es quien se encuentra fuera de la Ley surge de los respectivos pedidos de informes cursados al Gobierno de la Ciudad, respecto al otorgamiento de la explotación de la calle Valentín Alsina mediante Ordenanza o Decreto, la respuesta de las áreas involucradas al respecto fue contundente, no existe ningún aval.
Tal vez por la calidad de los socios del club, sus influencias y poder, nadie se haya ocupado a la fecha de correguir la ilegal situación, mucho menos corregir la conducta de la Policía de la Ciudad que debería tener el criterio suficiente para darse cuenta que los supuestos delincuentes son otros y no los que pretenden estacionar un par de horas en un lugar público.
Por Marcelo Ricardo Hawrylciw
