El joven golpeado, de 15 años, fue emboscado y masacrado. Incluso le tiraron encima un bloque de cemento. El ataque se produjo cerca de un boliche. Denuncian que el grupo actúa en la zona de Caseros y Perú.

Cristian Medina todos lo conocían por su apodo: “Bachi”. Tenía 15 años, estudiaba en un colegio secundario y vivía con su familia. El domingo a la madrugada, frente a un boliche en el barrio de San Telmo, se cruzó con una famosa y temible patota de la zona, integrada por unos 30 jóvenes, que salen habitualmente a “cazar pendejos” por diversión.

Los casos de chicos atacados se repiten, con gravedad dispar. Pero a Bachi literalmente lo lincharon, a golpes, patadas y hasta con un bloque de cemento, que fue arrojado por una integrante femenina del violento clan. El adolescente quedó desfigurado, con lesiones internas, y murió el miércoles. Por el caso, no hay detenidos, aunque los amigos de la víctima ya consiguieron las fotos que los principales agresores publican en Facebook. Durante la mañana de ayer, en el cementerio de Chacarita, allí, todo fue dolor, y el ruego para que se haga justicia. “No debería estar ahí Cristian, en un cajón cerrado, sino haciendo lo de siempre, con alegría”, dijo una de sus amigas. “Esto es muy injusto. Lo masacraron a golpes por nada. Son chacales sueltos, que se divierten pegándole a los chicos. Buscan pendejos, como dicen ellos, los salen a cazar. Ya hay muchos casos”, señaló. Viviana, madre de tres hijos adolescentes amigos de Bachi, alertó que “este grupo viene actuando hace rato, y parece que son intocables, porque ya hay varios episodios similares, aunque esta vez cruzaron el límite y mataron a un nene”, precisando que “en diciembre, a otro chico le pegaron tanto que le provocaron fractura en la mandíbula y en el cráneo, estuvo internado dos semanas y tuvieron que colocarle un placa de platino”.

Los amigos de Bachi, que acompañaron masivamente la despedida final de sus restos, explicaron que la patota “se mueve en la avenida Caseros, generalmente en la esquina con Perú, y desde ahí hacen lo que quiebién al robo. “Nadie los molesta. Vienen haciendo esto de pegarle a los chicos desde hace rato. Son salvajes. A Bachi le pegaron en la puerta del boliche, y después lo emboscaron en otro lado”, dijeron.

El primer incidente se registró en los alrededores de la discoteca “Club 947”, ubicado en Chacabuco y Estados Unidos. “Ahí le pegaron a Bachi y a otro chico que estaba con él, Matías, que terminó con cortes en la cabeza y lesiones en el cuerpo. Bachi también fue muy golpeado, pero logró irse de ahí. Estos tipos se subieron a las motos y autos, y empezaron a buscar. Le hicieron una emboscada cerca del Parque Lezama. Ahí lo lincharon, eran unos 30, con patadas y piñas, de todo. Un piba del grupo le tiró con un bloque de cemento”, contaron los amigos de la víctima.

En el caso interviene la Unidad Fiscal Este y efectivos de la comisaría 14ta. “Nos dicen que pronto habrá novedades. Los queremos presos antes del miércoles próximo, que se cumple una semana de la muerte de Bachi, y vamos a organizar una gran marcha. Tenemos sus fotos, y vamos a ir a sus casas. Sólo queremos justicia, que estén presos”, adelantaron los amigos.

“Le destruyeron los riñones a patadas”

Tras ser brutalmente golpeado por la patota, Bachi quedó tendido en el piso, hasta que fue socorrido por algunos amigos que lo encontraron y posteriormente por su propio padre, que lotrasladó por su cuenta al Hospital Argerich. Allí, lo revisaron, pero le dieron el alta. “Eso fue un error.

Bachi estaba muy golpeado, con heridas internas. Si lo hubieran atendido correctamente, tal vez hubiera tenido chances”, dijo Daniel, un vecino, que ayer acompañó la ceremonia. El joven se descompensó en su casa, y fue internado en la Clínica Esperanza, donde se hizo todo lo posible por salvarlo, pero un afección en los riñones derivó en su muerte.