Nicolás Degli Innocenti, un crimen sin justicia

Nicolás-Degli-Innocenti-y-su-padre

Nicolás Degli Innocenti murió al ser atropellado, en forma intencional, a la salida de un boliche, en San Telmo, al que concurrió a festejar su cumpleaños con amigos. Fue en enero de 2013. Un imputado resultó excarcelado. Y el conductor del vehículo permanece prófugo, aunque son varias las versiones que aseguran el mismo está ubicado en una provincia del interior.

A dos años del asesinato del joven Nicolás Degli Innocenti, quien fuera arrollado en forma intencional por un auto a la salida de un boliche porteño de San Telmo, aún se aguarda que la causa sea elevada a juicio, con un imputado que resultó excarcelado y un prófugo que es sindicado como el conductor, más otras dos personas que también aparecen complicadas en la investigación del caso.

En la madrugada del 27 de enero de 2013, Degli Innocenti (de entonces 33 años) había concurrido con un grupo de parejas amigas a festejar su cumpleaños y en el interior del local nocturno se habría originado un incidente con algunos jóvenes, que siguió en la calle, cuando habían decidido retirarse para no tener más problemas. En momentos en que caminaban por la esquina de Chile y Perú, un Toyota Corolla con cuatro ocupantes salió a toda velocidad, pasando por detrás de un colectivo de la línea 29 y subió a la vereda para embestir contra la víctima y un amigo.

Nicolás Degli Inoccenti sufrió heridas gravísimas en la cabeza, que le provocaron su deceso y pese a que los agresores escaparon, frente a la conmoción provocada por el hecho se inició una búsqueda, hasta que se logró hallar el Toyota Corolla color champagne que estaba oculto en un taller mecánico de la zona de La Boca, en cercanías del lugar que solían frecuentar los sospechosos, sobre la calle Irala.

Por el caso, fue detenido el propietario del vehículo, Francisco Paradela, quien quedó imputado por «homicidio doloso y abandono de persona», en la investigación que llevó adelante el Fiscal de Instrucción Sandro Abraldes, pero luego resultó liberado, debido a que tanto este sujeto, como sus acompañantes, señalaron que quien manejaba el auto y mató a Degli Innocenti era Joan Martín Nahuel Leyes, que, desde ese momento, se encuentra prófugo.

En consecuencia, mientras Leyes nunca pudo ser localizado (es nacido en el Chaco y habría constancias de sus contactos, mediante redes sociales, con sus familiares y allegados, que residen en La Boca), la sustanciación del juicio oral y público se fue aplazando.

Jorge Degli Innocenti, padre de la víctima, señaló a los medios: «Ahora estamos esperando que finalice la feria judicial e insistiremos en que la causa sea elevada a juicio, aún con el supuesto ‘autor material’ del crimen en ausencia. Es que existen muchas dudas, debido a que no está probado que el prófugo haya sido quien manejaba y no otro».

«En estos dos años hemos esperado, en forma paciente, pero sin dejar de reclamar, que finalizara la etapa de instrucción, en la que el Fiscal Abraldes hizo una muy buena labor, para que la causa sea finalmente elevada a juicio. Ya fue suspendido una vez, argumentando falta de pruebas y que no se pudo hallar a Leyes, al que parece que nadie busca. Nosotros, como familia, solo queremos justicia y que Nicolás pueda descansar en paz», señaló el padre del muchacho, actual concejal del Frente para la Victoria en Avellaneda.

Las evidencias recogidas en la escena, las imágenes de algunas cámaras de seguridad y el aporte de los testigos (entre ellos, el colectivero que vio la secuencia del fatal desenlace) fueron incorporadas en el expediente, que derivó en una acusación por «homicidio doloso, abandono de persona y lesiones graves».

Además, de Paradela, el propietario del Toyota Corolla, se encuentran imputados Jonathan Cabrera, acusado de amenazas a los amigos de la víctima, y Hugo Maldonado, del taller mecánico donde fue hallado oculto el auto. Sobre Joan Martín Nahuel Leyes sólo se sabe que está prófugo y con pedido de captura nacional e internacional, a través de Interpol.

En el tiempo, el apoyo de los cuadros políticos locales fue mermando y salvo la única marcha realizada en San Telmo, las muestras de acompañamiento a la familia no fueron relevantes, el brutal crimen generó también cruces internos entre algunos barras de Dock Sud y algunos punteros políticos, ya que los involucrados en el homicidio tenían vínculos con algunos de los que participan en movidas políticas en la zona.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *