Hoy, una vez más, el medio elegido por el municipio de Avellaneda, para ser el que exponga a la sociedad como la única solución a los problemas que hoy representa el Hospital Municipal de Wilde, sea el traspaso a la provincia de Buenos Aires, Inforegión publica una nota sin firma de autor, que titula «Insisten en provincializar el Hospital de Wilde» , haciendo mención que esta medida es impulsada por el bloque oficialista que encabeza el veterano concejal Jorge Degli Innocenti quien ha dejado de tener el protagonismo relevante que lo destacaba en el recinto para ser algo así, como «el pibe de los mandados».
Con esto, como presidente del bloque del FpV, el concejal intentará que se trate el traspaso en la próxima sesión y ver si puede agradar al intendente Jorge Ferraresi, quien ya tiene varios problemas a futuro en el HCD, los cuales de no ir encarrilándose serán un dolor de cabeza político, varios de los más cercanos al intendente ya comentan sin cuidarse, que sospechan de la lealtad de Degli Innocenti en el HCD, porque si bien se muestra elocuente y con un discurso defensivo de la gestión en público, no dejan de reconocer que el concejal se siente incómodo en el cargo, que a punto de retirarse no lo han tenido en cuenta para cargos y tareas más relevantes y en cambio otros, incluso jóvenes sin su experiencia le han mojado la oreja y hasta se burlan de él, no solo por ser mejor estimados desde el intendente, sino porque no se lo tuvo siquiera en cuenta en las designaciones de cargos de relevancia entre los integrantes del PJ.
Con este panorama, donde solo los «acuerdos» con los sectores de la oposición podrían hacer prosperar esta medida, las cosas no son tan sencillas. A diferencia de otras oportunidades son muchos los vecinos que se preguntan en las redes sociales ¿qué hacen y qué votan los concejales?, a pesar de que muchos medios locales y otros regionales aprovechan la desesperación del oficialismo y algunos concejales en que no se publique todo lo que se discute dentro y fuera del recinto del HCD, pauta oficial mediante, es casi imposible gracias a la velocidad y llegada de los recursos informáticos poder tapar todo.
Con un manejo discrecional y arbitrario de parte de la secretaría del HCD, a cargo del Ing. Roberto Sícari, en cuanto a los recursos y otorgamientos de «horas» para los concejales, un reclamo que solo se animan a realizar off de record algunos de los ediles de la oposición, sin que se den cuenta que ese silencio los hace cómplices de estas maniobras. Es por eso, que desde el Multimedios El Sindical, invitamos a todos los concejales que dicen representarnos a que nos presenten a los vecinos, los listados de personal con el que cuentan, desde asesores hasta personal de oficina y nos permitan saber si esos trabajadores se encuentran registrados como corresponde, con recibo de sueldo y obra social, ya que es hora de ir saneando el HCD y volverlo realmente honorable.
Y esta propuesta, esperamos sea hecha justamente por los concejales del oficialismo, como por ejemplo Ernesto Griego, que se ha preocupado ahora de los gastos del municipio, para que nos demuestre que este es su pensamiento y que si de ahorrar se trata, primero ahorremos en gastos políticos y después busquemos como invertir o generar recursos para la salud, ya que pretender ahorrar en salud es una burrada.
Idéntica medida esperamos de la concejal Manuela Sánchez, quien parece que su discurso sobre los motivos del traspaso del hospital los ha basado en su ubicación geográfica al decir “es verdad que es un hospital más provincial que municipal por la ubicación” , y sí, está ubicado en el mapa de la provincia de Buenos Aires, como el resto de los hospitales, como el resto de las comisarías, como el resto de los vecinos de Avellaneda. incluso el HCD está en la provincia de Buenos Aires.
Pero lo realmente incoherente del bloque del FpV que debería poder explicar el concejal de los libros en mano, es la enorme contradicción que no les preocupa ocultar. Por un lado, avalan la creación de una policía local, donde hasta proponen porque así se les ocurre a ellos, generar gastos que otros municipios no tienen, como ser financiar la formación de los primeros policías comunales (que dependen de la provincia de Buenos Aires, no del municipio) esperando según ellos en algún momento recuperar la inversión, crear observatorios dirigidos por neófitos en la materia de seguridad, pero dicen querer ahorrar en salud y traspasar el único Hospital Municipal.
Y en esto radica la principal contradicción de los concejales oficialistas, o nos toman a todos por tontos, no saben ni lo que dicen y menos lo que votan, o necesitan hacer un curso de razonamiento de lo que leen, se gasta mucho más en seguridad que en insumos hospitalarios, y aún peor, el presupuesto de salud de Avellaneda, es de los peores administrados, ya que la mayoría del mismo se utiliza para pagar salarios.
Durante años, los concejales de Avellaneda, han aprobado un presupuesto que nadie ha controlado, como tampoco nadie ha controlado los motivos por los cuales el Hospital de Wilde ha tenido una pésima gestión administrativa, donde se ha nombrado y pagado profesionales que ni siquiera han pisado el hospital.
La Ordenanza Fiscal anual, en su artículo 2do, dice: «Las normas municipales tributarias se consideraran vigentes y, por lo tanto, obligatorias, de acuerdo a lo dispuesto en el Artículo 2º del Código Civil. Constituyen medios de publicación oficial, sin perjuicio de aquellas otras que disponga el Departamento Ejecutivo en la reglamentación, el Boletín Oficial Municipal y los diarios y/o periódicos locales.»
Es decir, los concejales y funcionarios del ejecutivo con el intendente Jorge Ferraresi incumplen de forma reiterada y deliberada la Ley. Donde entre otras cosas que no se cumplen está reglamentada la forma de administrar recursos que debería haber cumplimentado el hospital.
Así, es necesario tener concejales que nos representen, pero también que estén capacitados para esa representación, que tengan la voluntad de trabajar, que si tienen asesores, esos asesores trabajen.
Si nuestros concejales tienen todo en orden, que nos muestren a los vecinos, quienes son sus asesores, que nos digan que conocimientos tienen en la materia que asesoran, que nos cuenten que proyectos trabajan, que nos digan si son vecinos de Avellaneda, algo que no se suele tener en cuenta, contratando gente de otros partidos y dejando desocupados a vecinos con igual o superior capacidad.
Existen ejemplos de gestión en varios partidos de la provincia de Buenos Aires, donde con menos recursos nacionales y casi todo o todo recursos propios han podido mejorar las condiciones de salud, seguridad, trabajo.
Seguimos los vecinos esperando que en lugar de discutir por la policía local, nos den una respuesta en qué se invierte el dinero destinado a la seguridad, como se controla y se hace prevención, nadie explica cuánto personal tiene la Subsecretaría de Seguridad y que conocimientos tiene ese personal, no existen garantías del funcionamiento de las cámaras de seguridad a pesar de lo que asegura Mónica Ghirelli.
La frutilla de las declaraciones que publica el medio sobre nuestros «iluminados» concejales la aporta el «payador» Degli Innocenti, cuando dice «la provincia puede aportarle la complejidad necesaria para que toda la gente sea atendida de una manera más correcta”.Durante años, él y varios funcionarios rechazaban las denuncias de los vecinos sobre la atención en el Hospital de Wilde, destacaban la inversión en salud y hasta de que era uno de los mejores hospitales del partido y que era municipal, bueno señores, el pez por la boca muere, el concejal reconoce y a confesión de parte, que los vecinos merecen ser atendidos de una manera más correcta, casi como lo que les reclamamos a los concejales una mejor atención a los vecinos, una mejor representación.
Hay quienes nos dicen que el hospital presenta graves fallas edilicias, algunas que no tienen reparación por lo que se necesitarían reformas importantes, y que desde el municipio quieren sacarse el problema de encima, ya que el intendente Jorge Ferraresi, fue el responsable de controlar la obra de construcción del hospital, junto con otros que se encuentran inmortalizados en el mármol del edificio, como sea, parece que todo es una cuestión de plata, de antes por malas inversiones y abaratamiento de materiales, ahora porque es costoso poner al hospital en condiciones, equiparlo y porque nunca tuvo una correcta administración que le permita administrar los recursos.
Por Marcelo Ricardo Hawrylciw
