Tras numerosas denuncias de vecinos de la zona, personal de Gendarmería allanó el local ubicado en la calle Buenaventura al 400, a metros de la avenida Hipólito Yrigoyen. «Tiene que haber un control para este tipo de actividades», protestó un vecino, al tiempo que aseguró que la «actividad» era «evidente» porque hasta repartían volantes en la puerta.
Gendamería allanó el lunes por la noche un prostíbulo en Turdera. Los vecinos habían realizado varias denuncias por este local ubicado a metros de la avenida Hipólito Yrigoyen, y señalaron que hasta repartían volantes en la puerta del departamento.
Efectivos de Gendarmería realizaron un allanamiento en el local ubicado en Buenaventura al 400, a pocos metros de la avenida. El lugar fue clausurado, pero desde la fuerza de seguridad no brindaron mayores detalles sobre el procedimiento.
Desde todos modos, Gendarmería, vecinos y desde la Municipalidad de Lomas de Zamora confirmaron que el procedimiento se concretó cerca de las 21:00 hs. del lunes.
“Encontramos a dos móviles de Gendarmería, y los efectivos nos confirmaron que era un allanamiento por el delito de trata de personas”, explicó uno de los vecinos que denunciaba desde hace tiempo la existencia de este prostíbulo. Según informó, la actividad de este centro era “clara y evidente” debido a que “repartían volantes para acceder al prostíbulo y las luces estaban prendidas las 24 horas”.
Además, aseguró que las quejas respecto a la actividad del edificio eran reiteradas y estaba en conocimiento de todos los vecinos desde hace “mucho tiempo”. Las denuncias también apuntaban a la entrega de “volantes inadecuados” a chicos, en plena vía pública.
“Este caso ahora está en manos de la Justicia el determinar culpabilidades y espero que cierre, a los vecinos les molestaba y no lo queríamos tener en nuestro barrio”, aseguró el hombre.
Según informó el vecino, las denuncias acerca de la existencia del presunto prostíbulo fueron dadas a conocer en reuniones que se organizaron en el transcurso del año pasado. “A los vecinos les molesta que esté ese prostíbulo ahí funcionando, con el tiempo se hicieron tan impunes y evidentes que ya todos sabían que estaba funcionando”, denunció el vecino.
“Estaban las sospechas de que habían menores de edad y se dudaba mucho acerca de las circunstancias en la que estaban esas personas, si estaban ahí por su voluntad o no”, advirtió el hombre, al tiempo que reclamó: “Tiene que haber un control”.