Tras dos semanas del encarcelamiento de Julio César Báez, el artista plástico de Temperley apresado mientras hacía una escultura de Santiago Maldonado, el Frente de Artistas del Borda se manifestó en las puertas de los Tribunales de Lomas de Zamora en reclamo por su libertad.

Daniel Calvo, coordinador del equipo de comunicación del Frente de Artistas del Borda, aseguró: “Viola las garantías institucionales, los derechos humanos y por eso vamos a seguir luchando por su libertad”.

En el día de mañana la jueza a cargo, Laura Ninni del Juzgado de Garantías 6 de Lomas de Zamora determinará la situación judicial de Báez quien mientras tanto continúa detenido por “resistencia a la autoridad”, cargo por el que ya fue acusado en dos ocasiones.

“Él no es una persona violenta pero no tenemos testigos que lo favorezcan a él, ya que los únicos que lo vieron fueron los mismos atacantes”, explicó Calvo. Ante la falta de testigos, distintas organizaciones sociales y de artistas de América latina presentaron una nota en apoyo a Báez.

Según lo relatado, el 20 de Julio Báez se preparaba frente a su casa para comenzar una escultura de Santiago Maldonado para presentarla en la marcha del 1 de agosto. Sin embargo, se presentó un vecino, quien aseguró ser el hermano de un Policía y lo intimó agrediendolo. “Lo golpearon con un grupo de personas, le lastimaron mucho la costilla y efectuaron cuatro disparos al aire. Entonces él se metió en su casa y le derribaron la puerta para llevárselo de prepo”, manifestó Calvo.

A pesar de que se solicitó la excarcelación, la jueza podría negar su libertad si determina que es “reiterativo en su accionar” y Báez podría estar de seis meses a un año en prisión efectiva. “Ella dice que no se puede liberar a una persona de estas características y que es violento”, explicó el integrante del Frente de Artistas.

Fuentes judiciales informaron que la razón es que Báez tenía una condena de 6 meses de prisión en suspenso, en 2013, por “amenazas leves agravadas en concurso real con resistencia al autoridad”.

En ese mismo año, otro juzgado correccional de Lomas, también por “resistencia a la autoridad” lo condenó a 15 días de prisión en suspenso.

Calvo consideró que el accionar de la jueza destacó que este accionar “es parte de la doctrina Chocobar”.

“Primero tiran la puerta abajo y después se fijan quien es y como es. Nos dicen que no era necesaria una orden de allanamiento ante una persona peligrosa y quien determina que es peligroso”, apuntó.