Respuesta de AGUSTINA FERRARESI Para todos los que suelen hablar sin saber y criticar sin fundamento:

Qué difícil! Uno en estos casos se hace muchas preguntas. Por donde empezar, no? Podría empezar yo por responder algunas preguntas tácitas. Soy hija de? Si, de Jorge si, de Magdalena no, aunque la quiera con toda mi alma. Mi mama, si les interesa, falleció hace un par de años. Tengo 25 años? Casi, cumplo en unos meses. No creo que eso me haga menos capaz. La tarea es más bien de gestión política, y creo que las miradas jóvenes, sumadas a toda la gente con la gran trayectoria y experiencia que conforma este espacio, se puede dar y armar un hermoso debate que lleve a cuestas un nuevo plan cultural con lo mejor del actual y un sinfín de propuestas increíbles que ya venimos armando. Tengo alguna carrera universitaria terminada? No, creo profundamente en la institución formal, me parece de suma importancia. Pero al mismo tiempo creo que la educación no formal es una formación hermosa y muy interesante. Hice innumerables talleres de arte, tengo formación actoral desde los 5 años. Actualmente estudio el profesorado de lengua y literatura. Voy a cobrar 38.000 pesos? NO! Claro que es lo que me correspondería por el cargo, pero con mi edad y mi vida, no necesito ese dinero y pedí expresamente que se me redujera a la mitad de eso, para que además, podamos jerarquizar de manera más justa el sueldo de mis compañeros que hacen un trabajo espectacular. Les cuento a todos que se abre una nueva dirección que desprenderá de la Secretaria de Cultura y Promoción de las Artes. La idea es terminar de ordenar y organizar un espacio en el que se deposita mucho presupuesto. Si alguno tiene alguna duda les cuento que Avellaneda cuenta con 8 institutos municipales (5 de ellos con título oficial) dos escuelas (Danza y Circo, Murga y Magia), 17 puntos culturales municipales en todos los barrios de Avellaneda, con más de 160 talleres, un programa de alfabetización municipal, el CMA, el Roma, entre otros tantos programas y proyectos que pueden descubrir si se acercan a cualquier punto de cultura o incluso a la dirección general que tendrá la puerta a abiertas a toda la comunidad. Entendiendo, si quieren hacerlo, el presupuesto que se destina a esta área, no debería ser sorpresa que en un momento de transición (el Sec. Después de muchos años en su cargo, se jubilará), mi padre quiera dejar en manos de alguien de su entera confianza esta tarea y desafío, a alguien que tenga esa capacidad de organización y prepotencia de trabajo. Eso será algo que solamente yo con el tiempo voy a poder demostrar, pero si quieren puede acercarse a Anses Wilde, donde el Jefe Omar Sempertegui, que pertenece a cambiemos, al presentar mi renuncia, se despidió de mí haciendo alusión a mi compromiso laboral. También para que sepan, ya que evidentemente el «periodismo» no se gasta en averiguar, en Anses mi trabajo era de atención al público. No tenía ningún cargo y amaba mi trabajo. Puede resultar insultante que los padres con la posibilidad de encontrarle trabajo a sus hijos lo hagan, y más cuando creen que es a costa de sus impuestos. Pero créanme que haré valerlos. También los invito a acompañarnos a trabajar las 12 horas diarias que venimos trabajando para hacer valer los impuestos que tanto les preocupan, y el presupuesto que se invierte en esta área. Es normal que a veces uno piense en función de su propia manera de ser y de pensar. Quizás por ese motivo resulte raro creer que por amor a la cultura y la igualdad social, yo haya elegido cobrar la mitad de lo que venía cobrando, trabajar el doble de horas y no tener ningún enriquecimiento ilícito como tantas mentes perversas están fantaseando. Repito que eso se demostrarácon el tiempo, y es uno de los tantos desafíos, romper con tanto prejuicio y mala leche. También, una vez que en julio cobre el primero sueldo con el monto que pedí expresamente, bastante menos al que osan decir, le digan al amigo infiltrado que saque una foto, para poder cerrar algunas boquillas que gustan de la difamación. Espero verlos a todos en alguna de las tantísimas actividades que se hacen diariamente y estamos abiertos a todas las críticas constructivas que sean en pos de una cultura popular al servicio de todas y todos. Los agravios quedan relegados a consciencia de cada uno. Quien me conoce sabe quién y cómo soy. La mochila del apellido es mi responsabilidad. La ideología política que busque una cultura de Avellaneda para una élite, se verá claramente ofendida en esta gestión que buscará todo lo contrario. En lo que a mí respecta, me parecía que merecía mi derecho a réplica, para ilustrar el entierro periodístico que abraza a este medio! Salú