Desde hace un tiempo, el partido de Avellaneda, se encuentra a merced de la delincuencia, los vecinos hartos ya no se quedan lamentándose en sus casas o con sus amigos, sino que utilizan las redes sociales para contar sus experiencias y para descargar su bronca por como ellos dicen «no poder vivir con miedo».
Desde el Multimedios El Sindical, hemos sido los pioneros entre todos los medios locales en denunciar la inseguridad, luego fueron apareciendo algunos medios digitales, atraídos por el oportunismo que suele dar el tiempo de elecciones y así, algunos «vende humo», les vendieron a algunos vecinos desprevenidos su discurso de ser un vecino preocupado por la seguridad de todos, cuando en realidad lloraba por la inversión realizada y por la falta de pauta de parte del municipio o bien soñaba con un puesto.
El primer blanco de la inseguridad como es lógico, fueron los Jefes policiales, algunos con justa razón y otros imposibilitados de poder conducir con honor una dependencia con los efectivos policiales heredados y las luchas internas propias de la fuerza, que suelen terminar comiéndose a buenos policías.
Con este panorama desfavorable, la corrupción que siempre sobrevuela a los funcionarios, encontró un nido importante en Avellaneda, donde de la noche a la mañana, comenzaron a aparecer algunos comercios no muy rentables, pero que a la vista son ostentosos por demás, así algunos lavaderos de autos poseen clientes con vehículos de alta gama, casi como si uno estuviera en Puerto Madero, ¿curioso no?. Vaya uno a saber los motivos por los cuales muchos de los policías con jurisdicción en Avellaneda han perdido la curiosidad o el olfato policial para investigar un poco la presencia de estos vehículos que no se condicen con sus dueños. De la mano de este boom comercial, aparecieron pequeños bares que reúnen a muchos jóvenes en sus reducidos espacios, contrariando disposiciones y violando normas de seguridad que al parecer los inspectores municipales de Avellaneda no detectan, y el personal policial tampoco sabe muy bien los motivos de que algunas mesas de esos lugares estén siempre abonadas a conocidos dealers que además suben las fotos a sus perfiles de Facebook.
Paralelamente, la clase media del sector más bajo, sufre por los robos de los motochorros que en el caso de Avellaneda se han reproducido como una verdadera plaga, especialmente en algunas localidades del partido, copando las plazas para sus reuniones y transacciones, curiosamente algunas plazas tienen asignado personal policial de la cuadrícula, pero también estos policías deben tener algún problema en la visión porque muchas veces delante de ellos pasa de todo.
Cuando los Jefes policiales intentan justificar su inoperancia, suelen culpar a la Justicia (Fiscales y Jueces locales) a veces con justa razón y otras como un método de tirar la pelota del otro lado de la cancha. Lo cierto es que entre ambas instituciones, sumado a los políticos, es panorama es desalentador y muchos vecinos ya optan por ser ellos y no los delincuentes, los que cambien las costumbres.
Vaya uno a saber, que entiende el actual Jefe Distrital Comisario Inspector Manuel Oscar Canosa, por informar a los vecinos, ya que si bien la propuesta de una página de la Jefatura Distrital es una muy buena idea (idea aportada por nuestro medio) pero tergiversar los hechos que allí se publican no es una buena idea, justamente porque el vecino de Avellaneda sabe muy bien cómo se producen los hechos policiales.
Recuerdo haber tenido entre mis contactos de Facebook un perfil y página que se llama Foro Vecinal Avellaneda Segura, de un tal Marcelo Mario Frecha, o «forito» que iba relatando a los vecinos los delitos que se cometían en Avellaneda, había un mapa del delito, consejos y criticas al personal policial, entre lamentos públicos de tener que pagar de su bolsillo los cafés para reunirse con los Jefes policiales, bueno, tanta rosca tuvo su premio, ahora ya no se queja de los cafés (dicen que se los pagan y con propina) y tampoco existe la misma critica al personal policial a pesar que las estadísticas nos demuestran que los delitos no solo han aumentado, sino que ahora son más violentos. Conclusión, el forito ha paso a ser «cafecito». Tal vez por eso en su etapa de cambios lo primero que pasó, fue que los que criticábamos los delitos y el accionar policial fuimos eliminados de las amistades, pero sí mantuvo a personajes que insultaban y amenazaban a los vecinos, tal vez por eso de que «la necesidad, tiene cara de hereje». Y coherente con su conducta, tiene un discurso público y otro privado, donde suele denunciar a muchos de los que tiene como amigos, pero no se hace cargo de sus dichos.
Tan evidente es la connivencia entre el Foro y la Distrital que es el único vecino al que la policía desde su web le hace promoción, es obvio que si esto ocurre es porque existe una garantía de que lo que ahora publica Marcelo Frecha es conveniente.
Como lo habíamos adelantado contrariando a todos los que aseguraban que con la llegada del nuevo Jefe Departamental las cosas iban a mejorar, fuimos el único medio que aseguró todo lo contrario y los hechos nos dan la razón, con el Comisario Mayor Fabián Perrone, no solo el delito aumentó, han desaparecido algunas recorridas policiales y la presencia de los efectivos ha disminuido considerablemente.
Una estadística producida por la propia Corte Bonaerense, señala a los partidos de la departamental como los lugares donde más delitos ocurren, aumentando los homicidios vinculados a las drogas año a año.
Los últimos hechos graves ocurridos en Avellaneda, donde tenemos que lamentar varios muertos víctimas del delito y donde el intento de robo al MacDonalds de Avellaneda, la web de la Distrital Avellaneda, segmenta la noticia para parecer un logro del personal policial de la Comisaría 1ra., nos hacen advertir como siempre en exclusiva, que estamos frente a un grave proceder policial, donde la imagen vale más que la realidad, desconocemos quién o quienes asesoran al Jefe Distrital, y esperamos por el bien de todos los vecinos que vuelva a entrar en razones y que conduzca como se debe a los efectivos a sus órdenes, porque lo virtual se puede «maquillar», segmentar, modificar, pero la vida de los vecinos es algo real, los muertos no van a resucitar por lo que se escriba en la página de la Distrital o en la web de Frecha.
Siempre estamos del lado de los que trabajan, cuando este medios tiene que destacar el trabajo policial lo hace, aún en contra de lo que escriben los mercenarios de turno, pero este tipo de PAYASADA, y con mayúsculas no es bueno para la imagen de la institución, la imagen se gana trabajando, estando cerca del vecino, con menos corrupción y más trabajo, mientras sigan desoyendo a la gente, estaremos señalando lo que ustedes no quieren reconocer.
Por Marcelo Ricardo Hawrylciw
