La empresa Elemento ya había sido noticia porque una empleada se había prendido fuego en protesta por el maltrato que recibía su lugar de trabajo desde hace 19 años. Ahora, los trabajadores rechazan el despido injustificado de dos compañeros.
Según un comunicado de los propios trabajadores, la empresa Elemento mantuvo «durante mucho tiempo el trabajo en negro, con jornadas extenuantes, sin cumplir el Convenio Colectivo, negando los derechos sindicales y una atención médica adecuada (con casos de pérdidas de embarazo)».
A más de un mes de que una trabajadora de la textil decidiera prenderse fuego así misma, «cansada de los maltratos que sufre hace 19 años en esta empresa», ahora despidió de manera injustificada a otros dos empleados, María Ugarte y Eduardo Toro.
Tanto Ugarte y Toro como el resto de sus compañeros se habían organizado para solidarizarse con Marina, la mujer que se prendió fuego. Realizaron colectas y festivales, y lograron que se cumplan los mínimos derechos laborales de 48 horas semanales y sin trabajar los sábados.
Pero de parte de la empresa hubo represalias: al lunes siguiente no les permitieron el ingreso de María y Eduardo.
La conmoción e indignación por todos estos hechos que empezaron a salir a la luz, hicieron que cientos de organizaciones y personalidades rápidamente se solidarizaran y se pusieran a disposición de los trabajadores. En pocos días, recibieron el apoyo y firmas de referentes políticos, sociales y organismos de DD.HH., como las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Liga Argentina por los Derechos del Hombre, Asociación Ex Detenidos Desaparecidos y el CeProDH.