El arzobispo de Buenos Aires, Jorge Bergoglio, encabezó esta tarde una dura homilía en el barrio de Constitución en donde se refirió a las redes mafiosas que se dedican a la trata de personas y la prostitución infantil.
«Esta Ciudad descarta. Hay esclavos que fabrican estos señores que están a cargo de la trata. La Ciudad es una picadora de carne que destroza la vida de estas personas y les quiebra su dignidad «, indicó Bergoglio en un mensaje muy similiar al que brindara a fines del año pasado durante una celebración religiosa en Liniers.
El arzobispo ejemplificó con el caso de una chica que la semana pasada fue emborrachada y drogada para «quebrar su dignidad». «Son organizaciones que van corrompiendo y destrozando, incluso con la droga, y después los deja tirado al borde del camino», ahondó.
Bergoglio, que evitó refererise a la discusión sobre el matrimonio gay, comparó la situación con los denominados sacrificos paganos y dijo que esta ciudad «hace sacrificios«, y marcó como responsables a «señores muy elegantes que comen en restaurantes de Puerto Madero, pero están manchados con sangre «.
De esta forma volvió a referirse a las coimas que permiten que existan estos nuevos esclavos.