Cervecería Las Artes, discriminación, despido y presentación en el INADI

El dueño de la cervecería Las Artes ubicada en Calle 7 n1278 e/ 58 y 59, zona de la Plaza Rocha La Plata, rompió el silencio, se presentó ante el #INADI y reconoció que «fue un error» prohibir la entrada de personas de más de 40 años en su local.

«La medida excluyente fue un error de un (ahora) extrabajador, basándose en políticas del mismo tipo que toman otros espacios culturales y recreativos de la ciudad», explicó el responsable del comercio ante las autoridades del organismo y revelaron que, por su cuenta, se puso a su disposición del procedimiento que se lleve adelante, aunque adelantó que no va a prestarse al juego de los medios y las redes.

«Una equivocación la tiene cualquiera, la Selección argentina perdió su primer partido y por ello no dejaron de alentarla», cerró.

Vale aclarar que el dueño del lugar de quien no trascendió su identidad, es un ejemplo de cobarde y pésimo empresario, hablar de un error y despedir a un empleado lo muestra como un cobarde, la decisión la conocía y la aceptó, por tanto la culpa es suya también y no se trató de un error sino de una decisión tomada.

Luego de conocida la denuncia de Federico Ocampo, otros denunciantes contaron situaciones similares, lo cual tira por tierra que haya sido un error sino que es o era un mecanismo sistemático. Otros denunciantes son Adrián Daniel Morales y Carlos M.

Por otro lado, limitar la edad a mayores de 40 años, cuando se ofrecen mesas de pool, metegol, ping pong y juegos de mesa, son juegos que no es de las juventudes sino más bien temporal a los adultos, partiendo de ahí, el dueño como empresario es un completo ignorante en su estrategia.

Declara que no se presta al juego mediático y de las redes, justo él que ha pagado publicidad en redes sociales promocionando su lugar, en definitiva más allá de la multa, este tipo de oportunistas merecen ser excluidos de las elecciones, lugares para salir sobran, una sociedad responsable, debe demostrar que no son ovejas que les pueden imponer donde divertirse y que pagan para ser maltratados, hay que darle la espalda, porque este impresentable despide a un trabajador y todo sigue, cuando el problema es él y su cervecería los que no deben seguir.

Por Marcelo Ricardo Hawrylciw

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *