Utilizaron el ruido de los manifestantes para disimular el limado de los barrotes y darse a la fuga. Tenía causas por «robo calificado y tentativa de homicidio».
Tres delincuentes escaparon esta noche de una comisaría en la localidad bonaerense de Glew, en el sur del conurbano, al aprovechar los ruidos por los cacerolazos que se producían en ese momento para limar los barrotes de la celda.
Fuentes policiales anticiparon que el hecho se produjo alrededor de las 20:00 hs., cuando se iniciaba la protesta nacional, en la seccional séptima de Almirante Brown.
Los tres delincuentes, quienes permanecían detenidos por formar parte de una banda que tenía causas por «robo calificado y tentativa de homicidio», tenían antecedentes penales.
Los sujetos aprovecharon el inicio de los cacerolazos y los ruidos de los bocinazos para limar los barrotes de su celda y así escaparse, mientras que de ahí pasaron a un pasillo de una oficina de guardia en desuso.
Posteriormente, saltaron desde la ventana a un patio interno para luego escapar de la comisaría.
Por estas horas se inició un intenso operativo rastrillaje para recapturar a los tres reclusos.
En un día en que el informe del Senado cuestionó severamente a la policía bonaerense por el caso Candela, un nuevo escándalo tiene como foco a la administración del ministerio de seguridad bonaerense, antes un grupo de delincuentes liberó a un peligroso delincuente en La Matanza de un camión de traslados del SPB.
Es extraño que delincuentes acusados de los delitos que se mencionaron estuvieran alojados en una comisaría que ya fue tomada por delincuentes anteriormente y liberaron a 11 detenidos, maxime cuando la gestión de Scioli aseguró que los detenidos no estarían más en las comisarías y que se los trasladaría inmediatamente a unidades penitenciarias.
