Lo veníamos advirtiendo desde hace un tiempo, que la designación del Comisario Inspector Gregorio Martínez era un acto imprudente del intendente Jorge Ferraresi, mal asesorado por Mónica Ghirelli y su segundo Marcelo Rey, que ya deberían haber sido removidos de sus cargos por la ineficaz gestión en los años en el área de seguridad.

Al aumento de robos en el partido, las quejas de cientos de vecinos de la falta de controles policiales incluso para hacer cumplir el aislamiento social.

En 24 horas Avellaneda está en todos los medios, vecinos de Wilde que muestran estar armados por la inseguridad, aún cuando eso constituye un delito, quejas en Gerli, Sarandí y Villa Domínico.

Se suma ahora la confirmación que un detenido en la comisaría 3ra de Dock Sud dio positivo para COVID-19 y hay dos detenidos con síntomas además de personal policial presuntamente infectado.

Se difundió por los medios televisivos, que el personal policial denunciaba como responsable de los contagios al titular de la estación de policía de Avellaneda, Gregorio Martínez, ya que hizo caso omiso a las advertencias del personal de la comisaría y denuncian los policías que eran obligados a patrullar en lugar de ser controlados en su salud.

Lo advertimos y reiteramos, en Avellaneda el clima esta enrarecido, las pocas y malas decisiones municipales demuestran que de seguridad saben muy poco, los reclamos de los vecinos crecen al igual que la bronca, una peligrosa combinación.

Por Marcelo Ricardo Hawrylciw