Una familia tipo que habita en la ciudad de Buenos Aires necesitó en setiembre 7.842,01 pesos para no caer en la indigencia, 16.013,68 pesos para no estar en situación de pobreza y 25.723,69 pesos para ser considerada de clase media.
De acuerdo con lo informado este jueves por la Dirección General de Estadística y Censos porteña, una familia porteña necesitó en setiembre 7.842,01 pesos para no caer en la indigencia, 16.013,68 pesos para no estar en situación de pobreza y 25.723,69 pesos para ser considerada de clase media.
El informe de Estadística de la Ciudad precisó que la Canasta Básica Alimentaria (CBA, que marca el límite de la indigencia) tuvo un incremento mensual del 1,74 por ciento e interanual del 18,51 por ciento.
Por su parte, la Canasta Básica Total (CBT, que mide el tope de la pobreza) registró un aumento del 1,81 por ciento respecto de agosto y del 22,64 por ciento en relación con setiembre de 2016.
En cuanto a la Canasta Total (CT, que en diferentes proporciones comprende a pobres no vulnerables, clase media frágil, clase media y sectores acomodados) tuvo un alza mensual del 1,99 por ciento y del 22,88 por ciento en doce meses.
A diferencia de la clasificación del INDEC, Estadística de la Ciudad reconoce seis estratos socioeconómicos.
Si se toma como referencia una familia compuesta por una mujer y un varón de 35 años de edad, ambos económicamente activos y propietarios de la vivienda, con dos hijos varones de 9 y 6 años, los extremos que marcan el estrato de la indigencia son de cero a 7.842 pesos mensuales.
En el caso de los pobres no indigentes, se ubicaron en setiembre entre 7.842,01 y 16.013,67 pesos. Los denominados «no pobres vulnerables» se ubicaron en el rango de 16.013,68 a 20.578,94 pesos. El «sector medio frágil» estuvo en setiembre entre los 20.578,95 y los 25.723,68 pesos.
La «clase media» se situó entre los 25.723,69 y los 82.315,79 pesos, nivel a partir del cual se ubicaron los denominados «sectores acomodados».