
El Impuesto a la Transferencia Gratuita de Bienes ya rige en Buenos Aires, según lo informó el director ejecutivo de la Agencia de Recaudación de la Provincia (ARBA), Martín Di Bella. La medida afectará a quienes hereden sumas mayores a los 200 mil pesos.
En declaraciones, el funcionario provincial confirmó también que «en la reglamentación del Impuesto a la Herencia realizada por la Agencia de Recaudación, no consta la facultad para que intervenga en las cajas de seguridad cuando éstas sean componentes de alguna donación, herencia o legado».
Resaltó que «en cambio, Arba sí podrá solicitar a la Justicia su participación a través de un perito designado para que intervenga en la tasación de los bienes que hay en la caja de seguridad”.
Los beneficiados que hereden 200.001 pesos, deberán pagar el 4 por ciento sobre el excedente de un peso. Si ese excedente supera los 125.000 pesos, la alícuota pasa al 4,075 por ciento. En el caso de familiares indirectos, si heredaron 50.001, pagarán 6 por ciento sobre ese peso excedente.
Di Bella sostuvo que “la provincia, entre otras exenciones, decidió liberar del pago del tributo a la transmisión gratuita de bienes a quienes hereden una propiedad valuada en hasta 100.000 pesos que sea destinada a residencia única familiar».
«En contrapartida, se resolvió gravar con énfasis a las grandes herencias, con alícuotas que crecen a medida que se incrementa el patrimonio heredado y, del mismo modo, que aumentan cuanto más se aleja el grado de parentesco del heredero”, agregó Di Bella.
Por último, destacó el funcioario que «un 80 por ciento de los recursos que genere el Impuesto a la Transmisión Gratuita de Bienes tendrá como destino el Fondo Provincial de Educación; un 10 por ciento se destinará al Fondo para el Fortalecimiento de Recursos Municipales; y el 10 por ciento restante irá al Fondo Municipal de Inclusión Social».