Mariel Dantuono, víctima de un secuestro express en Ramos Mejía, fue liberada luego de que por un llamado realizado por ella a su casa, su pequeña hija, sin saberlo, alertara a los delincuentes de que la Policía ya se encontraba en la vivienda, contó la víctima.
Tras ser obligada por los delincuentes a hacer un llamado a su marido para avisarle del secuestro y advertirlo de que no hiciera nada, Dantuono fue liberada después de que a través del teléfono, su pequeña hija de siete años, inocentemente, alertara a los secuestradores de que la Policía ya se encontraba en su casa.
“Me hicieron llamar a mi casa para tranquilizar a mi marido y pedirle que no haga nada. Cuando llamo, mi nena atendió y me dijo que la policía estaba en casa. Como estaba el altavoz prendido, escucharon, me bajaron del auto y me liberaron”, contó la víctima.
Según Dantuono, lo único que pedían los delincuentes era plata. “Me decían que querían plata”, dijo. Según la víctima, todo el secuestro duró media hora, tras ser interceptada en su auto y llevada a ser una recorrida por diferentes cajeros. “Incluso me ofrecí a sacar yo misma la plata porque ni siquiera sabían usar los cajeros”, añadió Mariel.
“No sé que hubiera ocurrido si hubieran ido a mi casa”, dijo preocupada la víctima, quien reveló que es su quinto robo y que todos los vecinos de Ramos Mejía están muy preocupados por el tema de la inseguridad. “Es muy común esto en Ramos”, añadió.
Según contó, estuvo rindiendo declaración hasta las cinco de la mañana, aunque desconoce si las autoridades dieron con la banda de secuestradores. Es el quinto robo que sufre Dantuono.