Está frente a las vías. Antes, había un alambrado por donde entraban y salían ladrones, cansados juntaron dinero y levantaron un muro con alambre de púas, luces y electrificado.
En la calle Matienzo, sobre el paso del Ferrocarril Roca y muy cerca de la tradicional cervecería del barrio de Quilmes, los vecinos decidieron armar un muro para contener la ola de delincuencia de la que se sienten víctimas.
Inicialmente allí había un alambre precario que no lograba frenar el paso de los malvivientes, ya que estos lo eludían fácilmente y utilizaban esa calle como lugar de escape de la zona tras cometer un robo.
Luego de enviar varios petitorios a las autoridades y de pedir alguna reunión para encontrar una solución, los vecinos se hartaron y decidieron incluso poner dinero de su propio bolsillo para contruir la pared, que –estimaron– sería un escollo más complicado para los ladrones.
«Pagamos $500 pesos cada uno para comprar los materiales, alambres electrificados, de púa y luces extra», contó una habitante de la zona.»Estamos siendo victimas de los delincuentes y tenemos quie financiar algo que nos debería dar el Gobierno, porque para eso pagamos los impuestos», se quejó la misma mujer.
Los impulsores de la polémica medida para luchar contra la inseguridad aseguran que la «reforma» fue positiva porque ahora se sienten «más seguros«.
