Con presencia en 8 países, la empresa de origen español somete al personal a jornadas extenuantes, sobre la base de la presión, el maltrato psicológico y la precarización de las condiciones de trabajo, según denuncia un grupo de trabajadores que decidieron afiliarse a la CTA para que los represente ante el manifiesto abandono sindical que padece el sector.
Para cumplir con su “política de optimización de costos” la multinacional española implementa el sistema de los supermercados denominados “chinos”, donde el trabajo se distribuye por el metro cuadrado sin importar si el trabajador puede realizarlo o no y para que lo realice se lo exprime hasta los límites de la resistencia física donde la única salida posible es la renuncia.
Y aunque en su página web supermercados DIA tiene claro que “que la clave del éxito del negocio reside en la capacidad de atraer, desarrollar, motivar y retener a nuestra gente” esta premisa solo es virtual, ya que no suena tan convincente para directivos como Nicolás Mihanovich, responsable de las sucursales de la zona de Grand Bourg, Jose C Paz, Escobar, Munro entre otras, quien vocifera en sus visitas a las sucursales de zona norte del conurbano bonaerense que esas personas a quienes DIA llama “nuestra gente” es “Gente a la que hay que meterle el dedo en el culo para que laburen y si no hay que echarlos a la mierda”. La definición gerencial determina lo que sucede a diario puertas adentros de sus establecimientos.
La estabilidad en el empleo es uno de los aspectos básicos en la política de Recursos Humanos. Dice la empresa. “Todo sanata, te echan por mensaje de texto, una persona que le avisaron por mensaje de texto que estaba desvinculada que se comunicara con Vicente López –en referencia a la oficina central- para que pasara por el arreglo, como no sabía que esto no se podía hacer, dejó de ir, después le llegó un telegrama de despido con causa por abandono de tarea, son de cuarta pero uno se la aguanta porque necesita el trabajo, todos tenemos familias”. Retrucó un empleado y agrega: “La única vez que fui al sindicato y eso que era para afiliarme a la obra social la empresa se enteró al toque”.
Otro trabajador de la cadena pero de la zona sur del gran Buenos Aires cuenta «estoy en una sucursal donde hay una delegada pero el sindicato la sacó para que trabaje en Osecac de no sé que cosa, en verano está cobrando la entrada a la pileta, quedamos en la misma porque la piba viene de vez en cuando y ya no es la misma persona que conocimos, se alejó de la gente, está en otra, entró luquearse, como que la metieron en una burbuja y ya no dice que la empresa es tan mala como ella solía decirnos para que la votemos». “Queremos trabajar, que nos traten con respeto, no puede ser que a las monedas la tengamos que llevar los cajeros o que en lugar de monedas nos den caramelos para que demos vueltos” comenta una joven cajera.
Desde Comercio CTA nos comunicamos con Mihanovich para que hiciera su descargo frente a las denuncias de los trabajadores pero este se negó a hablar sobre el tema y cortó abruptamente la comunicación.
Hola, este post es del 2012. Hoy en dia esto sigur siendo asi?
Yo empecé a trabajar en DIA hace una semana y algunas de estas cosas siguen siendo así, no siento el maltrato pero nos tienen a mil y con caramelos para el cambio?
Desde ya muchas gracias.