
Por 156 votos a favor, se rechazó el envío de 100.000 millones de pesos a la SIDE.
La Cámara de Diputados rechazó este miércoles el DNU de Javier Milei que implica el envío de 100.000 millones de pesos para fondos reservados de la SIDE. La votación fue 156 votos a favor, 52 en contra y 6 abstenciones, e implicó un duro revés para el Gobierno, pocas horas después de que el legislativo designara a un opositor al frente de la Comisión Bicameral de seguimiento de los organismos de inteligencia.
El mes pasado, el Gobierno había asignado cien mil millones de pesos a la Secretaria de Inteligencia del Estado (SIDE), que fue creada hace un mes, cuando disolvieron la Agencia Federal de Inteligencia. Fue a través del decreto 656 de Necesidad y Urgencia.
Los recursos estaban asignados como fondos reservados, por lo que sus autoridades no deben ser rendidos ante organismos de control.
La anulación del decreto consituye el segundo golpe al gobierno de Milei, ya que ayer se definió la bicameral y aparece Martín Lousteau.
Además, fue la primera vez que legisladores del PRO, impulsados por el expresidente Mauricio Macri, votaron en contra de los intereses del Poder Ejecutivo en una señal del resquebrajamiento de la relación política entre la fuerza política que conduce empresario y la del actual mandatario.
Escándalo en la Libertad Avanza
Este miércoles, el Congreso de la Nación fue escenario de un nuevo episodio de tensión, avivando la disputa interna dentro del oficialismo y desencadenando un cruce de acusaciones entre los miembros de la Libertad Avanza.
La legisladora libertaria Lourdes Arrieta, que representa a Mendoza, participó en la sesión que trató el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) destinado a financiar a la Secretaría de Inteligencia (SIDE).
Sin embargo, el DNU fue finalmente rechazado por los votos de las bancadas kirchnerista, radical y PRO. Esta decisión generó un fuerte malestar entre sus colegas de bancada, quienes acusaron a Arrieta de alinear sus acciones con la oposición.
El rechazo del decreto para la SIDE desató una crisis en el bloque libertario
Según se reportó, la confrontación alcanzó su punto máximo en el Salón Blanco de la Cámara de Diputados. Los reproches y acusaciones se intensificaron hasta que Martín Menem, un referente del bloque, solicitó la intervención del personal de seguridad.
En medio de la disputa, el diputado Nicolás Mayoraz se dirigió a Arrieta en un tono elevado, acusándola de fracturar el bloque y colaborar con la oposición. Cabe recordar que Arrieta había intentado distanciarse de la controversia relacionada con la visita a represores en la cárcel, responsabilizando a Menem de dicha situación.
Durante el altercado, la legisladora Arrieta se retiró del recinto visiblemente afectada, y su abogado, Yamil Castro Bianchi, declaró en medios que sus colegas intentaron retenerla por la fuerza.
Castro Bianchi describió el incidente como un acto de «cobardía suprema» y confirmó que Arrieta estaba presentando una denuncia en ese momento.
Por su parte, la diputada Lilia Lemoine se refirió al conflicto, criticando severamente a Arrieta. Lemoine la calificó como «una persona desequilibrada mentalmente» y negó las acusaciones de agresión física. “Lo que yo vi fue un escándalo protagonizado por alguien que no está en sus cabales”, afirmó Lemoine, insistiendo en que Arrieta no tiene “los patitos en fila”
La situación reveló profundas divisiones dentro del bloque, y la diputada Rocío Bonacci, quien también estuvo en la polémica visita al Penal de Ezeiza, salió al al frente para ofrecer su versión de los hechos.
En una entrevista con la prensa, Bonacci no dudó en calificar al bloque como «no está bien» y destacó que la reciente crisis refleja un problema más amplio dentro del espacio político.
Según Bonacci, la disputa con Arrieta se intensificó después de que esta señalara a Martín Menem y Beltrán Benedit como responsables de la visita a represores. En relación a los conflictos internos, Bonacci describió el ambiente en el bloque como uno de creciente descontento y caos.
La legisladora relató que Arrieta se retiró del recinto después de que Menem solicitara la intervención de seguridad, con la diputada Marcela Pagano facilitando su salida.
De esta forma, criticó el tono elevado de Mayoraz, quien está señalado por casos de violencia de género, y consideró que el trato hacia Arrieta fue injusto y desproporcionado.
Además, Bonacci mencionó que la bancada había propuesto la expulsión de Arrieta del bloque, pero aún discutió formalmente. «Estamos tratando de que el bloque esté más unido», comentó, defendiendo el derecho de Arrieta a expresar su versión de los hechos.
Bonacci también reveló que Arrieta había presentado una denuncia penal contra Benedit por amenazas recibidas, destacando que la legisladora había aclarado la situación en un momento de angustia, pero que no había sido escuchada adecuadamente.
Sobre la polémica visita al Penal de Ezeiza, Bonacci reafirmó que ella también había sido invitada por Benedit y subrayó que no se debería incriminar a una compañera por expresar la verdad.
Finalmente, en cuanto a la votación del DNU, Bonacci criticó la falta de apoyo a la propuesta y sugirió que la decisión de rechazar el DNU era una señal de que no era el camino adecuado para el cambio prometido.