Los profesionales y técnicos del Hospital Garrahan decidieron profundizar las medidas de fuerza que realizan ante lo que calificaron como una «actitud inflexible de las autoridades» de ese centro respecto de sus demandas y, por lo tanto, resolvieron convocar a nuevas protestas.
Luego de cuatro movilizaciones, el personal decidió realizar desde las 13:00 hs. de este martes una marcha y, otra la semana próxima, que incluirá el corte de una hora de las Avenidas Entre Ríos y Brasil.
Los trabajadores exigen «un aumento salarial del 40 por ciento, la defensa de los derechos de todo el personal y que se garantice el derecho a la salud de la población infantil», indicó el gremio.
Liliana Ongaro, presidenta de la Asociación de Profesionales del Hospital Garrahan (APHG), informó que luego de innumerables notas enviadas a partir de octubre último, el Consejo de Administración y la Dirección Médica Ejecutiva recibió al sindicato, aunque la respuesta a los distintas demandas fue negativa, sostuvo.
«Ante la reiteración del pedido de cambio de la carrera hospitalaria por ser inequitativa, discriminatoria e injusta, y advertir que provoca el empeoramiento de las condiciones laborales, el titular del Consejo señaló que `sus bases filosóficas no estarán sujetas a modificación`».
Es decir, ratificó que «no se modificará el criterio de encuadramiento de los profesionales no médicos en categorías inferiores a las de los galenos, por lo que se continúa soslayando la advertencia gremial en el sentido de que esta carrera destruye de forma progresiva el equipo interdisciplinario y puede arriesgar la calidad de la atención», explicó Ongaro.
El Garrahan tiene 510 camas de internación general y 120 en 6 unidades de cuidados intensivos, con una ocupación del 95 por ciento y un promedio de internación de 7,5 días.
Para ofrecer asistencia a los internados y a las 401.341 consultas externas anuales, 62.644 emergencias, 177.888 programadas, 79.246 no programadas y 9.226 intervenciones quirúrgicas, emplea a un equipo de 3.500 agentes, 500 contratados, 400 médicos y 1.000 enfermeros, puntualizó la dirigente.
«La paulatina destrucción del equipo de salud y del trabajo interdisciplinario propicia un clima laboral adverso para la adecuada tarea asistencial que, en definitiva, podría vulnerar el derecho a la salud de la población infantil», subrayó Ongaro.
La sindicalista enfatizó que la nueva carrera debería ser «inclusiva, no discriminatoria, equitativa y de respeto al nivel intelectual y de formación académica de los integrantes del equipo de salud y de todos los trabajadores», concluyó.
nacecito info de los beneficiados