Buscan que condiciones de trabajo dignas y jornadas que no superen las 48 horas semanales. Héctor Recalde se comprometió a analizar la propuesta del gremio AMAP.
La Asociación de Médicos de la Actividad Privada (AMAP) presentó al diputado Héctor Recalde un proyecto de Ley que promueve que los médicos residentes cuenten con una relación de dependencia que les garantice derechos laborales, condiciones de trabajo dignas y jornadas que no superen las 48 horas semanales.
«Actualmente el médico residente trabaja un promedio de 100/110 horas semanales«, denunció Héctor Garín, secretario general de la entidad, sumándose a la campaña en redes sociales que denuncia las extensas jornadas laborales de los médicos en América Latina.
El legislador nacional especialista en derecho laboral, Héctor Recalde, no solo recibió el proyecto sino además prometió a AMAP que «será analizado y luego pondrá en marcha todos los resortes administrativos para darle impulso y lograr que sea tratada por el Congreso de la Nación».
La iniciativa cuenta con veinte artículos que contemplan diferentes aspectos, cuyo punto más destacado es el que establece que el trabajo de los residentes médicos debe ser contemplado por las empresas de salud como una relación de dependencia laboral durante todo el período que dure esta instancia de formación.
El fenómeno parece repetirse en diversos puntos del globo: la campaña en redes sociales #Yotambienmedormi muestra a médicos durmiendo en los hospitales producto de las extensas jornadas laborales que realizan como parte de su trabajo habitual.
«Los residentes están sujetos a una enorme presión, y muchas veces a un maltrato muy fuerte. La residencia se ha convertido en algunas clínicas y sanatorios en una forma de esclavitud moderna. Las mujeres son un grupo especialmente vulnerable, por sus situaciones de embarazo, o licencias por maternidad», agregó Garín.
El dirigente gremial concluyó que «es clave regular el trabajo de los residentes, hoy se le encomiendan tareas y responsabilidades de un médico de planta, pero con un régimen de trabajo muy abusivo. Las empresas de salud deben cumplir su rol capacitador y no usar al residente para cubrir baches».