El día más negro del gobierno de Mauricio Macri, se cayó la sesión en el Congreso de la Nación por el escándalo en la Cámara de Diputados, enojado el presidente firmó un DNU que luego debió anular mostrando un ejecicio del poder débil.
Tras los gravísimos incidentes en las adyacencias del Congreso y luego de que se levantara la sesión, Mauricio Macri firmó un DNU y dio marcha atrás luego de las presiones recibidas por parte de la CGT y de la líder de la Coalición Cívica Elisa Carrio.
El presidente barajó la posibilidad de aprobar la reforma por decreto, la misma fue firmada por todos los ministros pero, luego de evaluar los riesgos, dio marcha atrás.
El documento incluía una compensación para que los jubilados no se vieran afectados por el empalme entre las distintas legislaciones. Sin embargo, al poco tiempo, decidieron no sacar el decreto.
Pese a que el Gobierno convocó una transmisión oficial de urgencia, también desistió de enviar un mensaje público desde la Quinta de Olivos.
El integrante del triunvirato que conduce la CGT Héctor Daer afirmó este jueves que la central obrera convocaría a un paro desde las 0 hora del viernes si el gobierno sanciona la reforma previsional por decreto de necesidad y urgencia.
En tanto, Carrio manifestó a través de su Twitter: «Carrio y la Coalicion Cívica juraron respetar la Constitución Nacional y no la van a violar bajo ningún concepto. Un DNU violaría gravemente la Constitución Nacional».
