Mientras las medios se encuentran abocados al circo mediáticos de la Feria de La Salada, donde nadie se quiso quedar afuera y después de años de denuncias, de informes, en 24 horas varias fiscalías locales y un juzgado federal que solo avanza en causas mediáticas, varios vecinos de Lanús realizaron un escrache en las oficinas comerciales de EDESUR y en el municipio.
Un grupo de vecinos se autoconvocaron en las puertas de las oficinas comerciales de EDESUR en partido de Lanús, en la Av. Hipólito Yrigoyen 4636, allí comenzaron con reclamos y ante la actitud de los empleados que los habrían invitado a salir, comenzaron a arrojar objetos contra el edificio lo que provocó roturas de vidrios, suciedad ya que arrojaron bolsas de residuos contra el frente del lugar y un principio de incendio al quemar parte de la basura.
Posteriormente el grupo se dirigió hasta las puertas del municipio de Lanús, donde al encontrar cerrado el vallado que protege el edificio público quemaron una de las garitas de acceso y parte del portón, lo mismo ocurrió con el ingreso al edificio de monitoreo de cámaras de seguridad.
Los vecinos denuncian que en una semana 5 menores resultaron muertos por incendios provocados por la falta de energía eléctrica en varios barrios y los métodos inseguros para tener calor, también varios vecinos denunciaban que las facturas mensuales con montos de alrededor de $500 comenzaron a llegar con aumentos que las llevaron a $4000 a $5000 mensuales, algo impagable para la mayoría de los vecinos.
En el municipio se encontraba personal de limpieza apresurado en borrar las huellas del reclamo y en EDESUR, aguardaban personal de patrimoniales para documentar los daños y recién después limpiar y reparar los daños.
Ni la empresa EDESUR S.A ni el municipio que gobierna el referente del PRO Néstor Grindetti emitieron comunicado alguno que aclare de su parte qué es lo que ocurre en el municipio, los problemas de energía eléctrica no son nuevos en el municipio y ya en varias cesiones se votaron medidas para solucionarlos, pero por los resultados, la inversión no llegó a las obras.
Por Marcelo Ricardo Hawrylciw