El ministro de Educación porteño, Esteban Bullrich, reveló que el proyecto oficial supedita entre un 5% y un 10% del salario por presentismo a que los educadores se sometan a la prueba. Desde el sector gremial ya manifestaron reparos.
Bullrich aseguró, en declaraciones a Radio 10, que la intención no es castigar a nadie, sino “marcar los errores” de los docentes, para que los corrijan. “Es un diagnóstico para ver lo que se hace bien y lo que se hace mal. Lo que se hace bien puede difundirse a otros docentes y lo que se hace mal debe corregirse”, sostuvo el ministro.
“El examen no es para bochar, sino para marcar lo que se hace mal y mejorarlo”, sostuvo Bullrich, quien aseguró que se tuvo en cuenta un modelo aplicado por autoridades educativas de Ecuador.
También indicó que el proyecto oficial se relaciona con premios económicos a los que se presenten a los exámenes, aunque está abierto a otras posiciones, como la de castigar a los que no se presentan.
El funcionario sostuvo que en los últimos años “el maestro ha perdido prestigio” en la Argentina, que ha descendido en el nivel educativo con respecto a sus vecinos, y consideró que es una “responsabilidad” gubernamental volver a otorgárselo.
Por su parte, el secretario de prensa de la Asociación de Docentes de Enseñanza Media y Superior (Ademys), Carlos Oroz, manifestó a la misma emisora su oposición al proyecto al considerar que “mercantiliza la educación”.
Para Oroz, la iniciativa de la Ciudad “generaría una sana incompetencia, porque no es lo mismo una institución escolar que un McDonald’s”, y opinó que en ellas “deben regir criterios más solidarios que de competencia”.
El dirigente aseguró que la política educativa de Ecuador se da en un contexto en el que los docentes trabajan 40 horas semanales, diez de ellas dedicadas a tareas sin alumnos, como corrección de tareas y capacitación. En cambio, sostuvo que “la Ciudad ha profundizado la crisis institucional educativa”.
Además, aseguró que la docencia ya cuenta con mecanismos para dar mérito al docente que se capacita como el de puntuación, que le permite elegir el destino y acceder a mejores cargos.
