Juicio por Rafael Nahuel: Cada vez más pruebas en contra de la teoría del “enfrentamiento armado”

En las jornadas de esta semana en el juicio oral por el homicidio de Rafael Nahuel, realizadas ante el Tribunal Oral Federal de General Roca, declararon tres especialistas en la detección de restos de residuos de disparos de armas de fuego, dado que en la instrucción se habían detectado partículas tanto en los prefectos, como en Fausto Jones Huala, Lautaro González y en una prenda que vestía Rafael Nahuel.

Al declarar ante el Tribunal, los tres especialistas coincidieron en que la presencia de partículas compatibles con disparos de armas de fuego no implica necesariamente que esas personas hayan disparado. «Pueden haber disparado, pueden haber estado cerca de la persona que disparó o incluso existe la posibilidad de transferencia de partículas, cuando una persona con partículas toca a otra, y le transfiere la contaminación», explicaron los expertos Daniel Converso, Fernando Báez y Adriana Serquis.

Esta aclaración es sumamente importante, dado que las defensas de los prefectos sostienen la teoría del «enfrentamiento» con armas de fuego. Es decir, que miembros de la comunidad mapuche habrían disparado contra el grupo de albatros. Al no haberse encontrado nunca ninguna arma de fuego ni rastros de municiones que no sean las de los prefectos, el único indicio en el cual se sostenía esta teoría era en los rastros de partículas compatibles con disparos encontrados en manos de Jones Huala y González y en una prenda de Nahuel. Ahora, los especialistas aclararon que eso no era una prueba de que hayan disparado.

De hecho, Serquis mencionó especialmente que en distintos estudios se habla de la contaminación que existe en determinados lugares, como móviles policiales. También los expertos, ante preguntas concretas, explicaron que el hecho de que alguien que disparó luego le coloque esposas a otra persona, puede transferirle partículas. Y ante una gran cantidad de disparos en un ambiente, como sucedió en este hecho, las partículas quedan en el aire y pueden caer en otras personas que están en el lugar y no dispararon.

Por todo esto, para la querella de la Secretaría de Derechos Humanos fue una jornada de suma importancia donde quedó más claro que la teoría del «enfrentamiento armado» no se verifica en la prueba recogida, y que lo que hubo fue una persecución disparando con munición letal a personas que escapaban arrojando piedras.

Por otro lado, el Tribunal dispuso que en próximas semanas a determinarse, se hará una inspección ocular al lugar de los hechos con la presencia de las partes y los peritos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *