Victoria Donda sufrió intimidaciones en su departamento en Boedo cuando un hombre de mediana edad, identificado como chofer del área de automotores del Congreso de la Nación, se anunció ante el portero para trasladarla al aeropuerto.

La diputada tenía previsto viajar a Tucumán para participar de la última jornada del juicio por la desaparición de Marita Verón, pero dado el estado gripal que la aqueja había cancelado el viaje.

En un primer momento, Donda supuso que se trataba de una “confusión”. Sin embargo, cuando se comunicó con el área de automotores, la persona a cargo le dijo que habían recibido la cancelación del servicio y no habían enviado ningún móvil.

Cuando la diputada bajó a abrir, este hombre -que precisamente preguntó si quien bajaba a abrir era Victoria Donda- dijo que lo habían enviado de Barracas. Viendo que había vecinos en la vereda, fue hasta el Renault Megane que estaba estacionado en la esquina con la excusa de hablar con la agencia y se retiró raudamente, según informó la legisladora del FAP.

Ante esta situación Victoria Donda envió un comunicado a la prensa: “Nos parece más que dudoso este episodio. Por lo que alertamos a las autoridades nacionales, quienes son responsables por velar por la seguridad de todos los ciudadanos y denunciamos este hecho ante la opinión pública”, manifestó.