Hebe de Bonafini le pidió al gobernador Alperovich «si sabe dónde están los prostíbulos que ponga las bolas y los cierre»

discurso-Hebe-de-BonafiniLa titular de Madres de Plaza de Mayo exigió al gobernador tucumano que «cierre los prostíbulos». Las acusaciones contra los jueces provinciales.

En la tradicional rueda de los jueves de la Asociación de las Madres en Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini brindó un discurso hipercrítico contra el gobernador de Tucumán, José Alperovich, los jueces que absolvieron a acusados de la causa y también a los clientes de los prostíbulos.

«Ay Alperovich lo que dijo», comenzó Bonafini. «Si  Alperovich sabe dónde están los prostíbulos: que los cierre«, exhortó. «Desde acá  le digo: gobernador, si usted está con Marita, está con la gente como  dijo ayer que va a acompañar, acompañe: ponga las bolas, cierre los  prostíbulos porque usted sabe dónde están», ordenó Hebe ante un grupo de Madres y militantes K.

Bonafini fue incluso más crítica con los magistrados tucumanos: «Yo pienso que estos tres jueces se  perdonaron a sí mismos, no es que perdonaron a los asesinos».  «Interpretémoslo bien, porque ellos son clientes de los prostíbulos,  ellos son los principales clientes de los prostíbulos», acusó.

Y siguió: «Estos jueces son los consumidores de  esos lugares y se perdonan a ellos mismos cuando perdonan a tanto asesino.  No hay que pensar porqué lo habrán hecho, le dieron plata. No, no: se  están perdonando por lo que hacen. Así que saquémosles fotos».

Hubo más: «Ellos necesitan  de estas pibas y cada vez las quieren más jovencitas y más chiquitas«. «A las madres que les faltan  las hijas que se animen, que no tengan miedo, que se compren cámaras  fotográficas chiquitas y que vayan a la puerta y que fotografíen a los  clientes y a los autos», interpeló. «Si no hay clientes no hay putas. Y nadie nace  puta, nadie quiere hacerlo«, remarcó.

La presidenta de Madres hizo hincapié en «criminalizar» a los usuarios: «Así que luchemos contra los consumidores de los prostíbulos más que  contra los asesinos porque esos son los grandes señores, estos que se  horrorizan, cuántos dirán ‘ay qué barbaridad’ pero cuando llega la noche  hay que ver adónde van».

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