El prosecretario de una Sala de la Cámara Nacional de Casación Penal fue acusado de acosar sexualmente a una empleada de limpieza en los tribunales federales de Comodoro Py.
El escándalo se registró hace dos semanas, pero recién ayer explotó en los tribunales federales de Comodoro Py, del barrio de Retiro, cuando se conoció que un alto funcionario judicial fue denunciado por acosar sexualmente a una empleada de limpieza del predio, y el caso ahora es investigado por la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia y una fiscalía especializada en delitos sexuales.
De acuerdo a la información que trascendió ayer, el acusado es el prosecretario de una Sala de la Cámara Nacional de Casación Penal, uno de los organismos judiciales más importantes del país, encargado de revisar fallos de primera instancia en el marco de causas por delitos federales.
La escandalosa situación ya se conocía desde mediados de noviembre en los pasillos de Comodoro Py, sin embargo tomó trascendencia pública ayer a través de un informe periodístico en la radio Vorterix.
Aunque durante la jornada se mantuvo el hermetismo en los tribunales federales, finalmente se indicó que la presidenta de la Sala 1, Liliana Catucci, decidió convocar -a través de una secretaria- a la presunta damnificada, una joven empleada de limpieza, para obtener el testimonio directo sobre la escandalosa persecución sexual.
Luego, se presentó una denuncia ante la Unidad Fiscal de Delitos Sexuales de la Procuración General de la Nación, pero también se solicitó la intervención urgente del personal especializado de la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia.
La información que se conoció durante la jornada de ayer en torno a la denuncia sostiene que el acusado, un alto funcionario con grado de prosecretario, acosó sexualmente a la mujer en los baños del predio de tribunales, y otra versión indicó que la convenció para desempeñar tareas domésticas en su propia casa, donde habría ocurrido el delito denunciado.
Asimismo, se conoció que a partir del escándalo, la empresa de limpieza a cargo del predio habría sido presionada apenas ocurrió el hecho para modificar el destino laboral de la mujer presuntamente acosada sexualmente. Así, la damnificada habría sido cambiada de edificio.
«Un empleado se acercó a otra chica de limpieza preguntando por el hecho y recibió esta respuesta: «se piensan que porque trabajamos en limpieza, tenemos que hacer todo lo que nos pidan, sea lo que sea». Se espera un comunicado oficial que aclare las cosas», informó anoche el portal Expediente Político, que siguió el caso.