El agresor justificó su accionar porque la víctima «lo venía robando». Pese a que quiso huir, fue detenido gracias a las cámaras de seguridad del Municipio de Tigre.

El dueño de un galpón de Tigre fue detenido acusado de matar de un balazo en la cabeza a un empleado al que acusó de robarle metales.

El conflicto se inició cuando el dueño del galpón, identificado como Víctor Alberto Espinoza descubrió que uno de sus empleados, Paulo Gomez, le robaba metales, motivo por el cual lo increpó, aunque recibió como respuesta una amenaza.

Más tarde, personal policial de la comisaria 1ra. de Tigre fue alertado por el Centro de Monitoreo del Municipio que en el cruce de las calles Coronel Rosales y Lucio V. López, en el barrio Los Tábanos, un hombre a bordo de un Ford Fiesta Kinetic habría realizado un disparo en la cabeza a otro, para luego darse a la fuga.

Los policías persiguieron al sospechoso hasta que este ingresó a un domicilio ubicado en la calle Pampa 1960, de la localidad de Rincón de Milberg, donde finalmente fue detenido.

Allí, los uniformados realizaron un allanamiento y procedieron a incautar tres revólveres -uno calibre 38, otro calibre 38 corto y un calibre 22-, una pistola 9 milímetros, varias municiones de distintos calibres y el vehículo en el que se trasladaba Espinoza.

La víctima, Gómez, fue trasladada de urgencia en ambulancia hasta el Hospital General de Pacheco con una herida de arma de fuego en la cabeza donde falleció.