Denuncian ataques a estudiantes de la Facultad de Odontología

  Un grupo de estudiantes de la Facultad de Odontología denunció la embestida de un hombre que les inyectó líquido anestésico pero que lograron escapar. «Las chicas sintieron que se les adormecía una pierna”, relató Tomás Cardozo, el representante del centro de estudiantes.

Los estudiantes de la Facultad de Odontología están en estado de alerta por una serie de incidentes que ocurrieron entre el miércoles y el jueves, cuando siete alumnas denunciaron que fueron pinchadas con una jeringa que contenía líquido anestésico.

Si bien ninguna de ellas sufrió posteriormente algún tipo de ataque, pues en todos los episodios lograron escapar de la situación a tiempo, los alumnos comenzaron a investigar y a tomar las medidas necesarias para que ninguna persona vuelva a ser víctima de esta agresión.

El peor momento fue el miércoles, cuando se habían registrado cinco de los siete casos en apenas una hora, y todos en las inmediaciones de los cuatro establecimientos que nuclea la Universidad de Buenos Aires y que tiene en sus alrededores la Plaza Houssay, un escenario más que peligroso de acuerdo con quienes recorren la zona diariamente.

Ese mismo día, la policía logró detener a dos personas sospechosas, aunque ninguna estaría relacionada con estos hechos de violencia. Tomás Cardozo es el representante del centro de estudiantes y quien estuvo al frente de la situación en las últimas horas.

El alumno relató los sucesos al informar que “un hombre las embistió de frente con un líquido anestésico y las chicas sintieron que se les adormecía una pierna”.

Las reacciones fueron similares, ya que ninguna pudo ser captada por el atacante. “En un caso, la chica empezó a los gritos y se acercó a la facultad. Inmediatamente las autoridades la llevaron a un hospital para que la atendieran y le hicieran análisis”.

Y explicó que “en todos los episodios las chicas salieron corriendo”, por tal motivo, aún se desconocen las intenciones de los ataques. Tomás sostuvo además que la descripción realizada por las jóvenes afectadas coincidía en que el agresor era “un hombre de contextura grande, con guantes, que las pinchaba y continuaba su camino”.

La plaza, una trampa

La mayoría de los estudiantes de las universidades que se encuentran en las adyacencias de este espacio verde denunció que “es una zona liberada” desde hace muchos años.

Martín Volpe, perteneciente al centro de estudiantes de la Facultad de Economía, reafirmó esta teoría: “No nos sentimos cuidados, sobre todo en horas de la noche o cuando no hay luz a la mañana”, y sostuvo que, a pesar de que hay más presencia policial, “los casos de inseguridad continúan”.

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