Anteriormente, advertíamos desde El Sindical, sobre una nueva demora policial del menor conocido como Chucky, una más de las tantas, en el 2019 registra más de 30 imputaciones por delitos varios.
Alexis Damián P., es un delincuente reincidente a pesar de sus 15 años, ahora volvió a ser demorado cuando armado y con golpes intentó robar un auto a un chofer de UBER en la localidad de Sarandí, revelando su caso que la justicia de responsabilidad juvenil es un fuero que no funciona como se esperaba cuando se creó, donde solo se apilan los expedientes que no tienen ningún seguimiento, una situación que muestra ineficiencia por parte de la Corte Bonaerense y de la Procuración General de la Provincia de Buenos Aires por el otro, dejando a los ciudadanos de la provincia de Buenos Aires en manos de los delincuentes menores de edad.
El caso de Chucky se agrava porque no se tratan de delitos menores, sino que ya son varias las veces que este adolescente es demorado por violentos robos y el uso de armas.
En los responsables institucionales, curiosamente los que suelen criticar al intendente Jorge Ferraresi por la inseguridad, equivocados en las funciones y la injerencia municipal, nada dicen al respecto de la situación de menores como Chucky que reinciden semana a semana, con la gran cantidad de demoras policiales hay que sumar las veces que tiene éxito en sus tropelías delictivas, entonces, el Estado falla cuando existiendo la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia, con una Directora Lorena Ramundo, poco es lo que se ha hecho de forma efectiva por los Derechos de los Niños, demostrando no estar a la altura de su cargo, con más ausencias laborales que trabajo, lo que hace que su equipo trabaje sin control y en la misma ineficiencia que la directora, más afecta a las fotos en los actos que a trabajar en beneficio de los menores vulnerables.
Jorge Ferraresi, inauguró en el 2017 el edificio del “Centro Integral de los Derechos de los Niños”, ubicado en la calle Colon 818 de Avellaneda Centro. El mismo cuenta con 360 mts2 de superficie cubierta, distribuidos en dos niveles, y se hizo gracias a una inversión de $ 5.590.000.
La obra se llevó a cabo en el marco del programa municipal “Una Obra por Día” y tiene el objetivo de materializar en un mismo espacio físico un centro que aborde de forma integral los niveles de prevención, atención directa, promoción, protección y restitución de derechos a la población de niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad.
El edificio tiene oficinas administrativas, espacios de juegos, un salón de usos múltiples, biblioteca, sanitarios, patios y todas las áreas de trabajo para este abordaje completo.
Durante su discurso, Ferraresi remarcó que “este es un tiempo complicado, por eso hay que redoblar el esfuerzo para atender los derechos que se van vulnerando. Con estas obras, demostramos la responsabilidad de este Estado municipal para ocuparnos de cada aspecto que le importa a nuestra comunidad”, y en ese sentido contrapuso: “Esta es la peor gestión de la historia de un gobierno provincial, sólo hay que ver el deterioro en cuestiones de salud, educación y seguridad, que son pilares fundamentales para cualquier Estado”.
No es un dato menor que a nadie le importe ocuparse de la situación de los menores y el delito, teniendo en cuenta que hoy los delitos cometidos por menores van en incremento.
Por Marcelo Ricardo Hawrylciw
