El insólito hecho ocurrió en el barrio porteño de Balvanera y revela que la Policía de la Ciudad carece de formación, actitud de servicio y que la Taser no resuelve la falta de criterio y capacidad para el ejercicio de la profesión, se detuvo un intento de robo y queda detenido el que intento, pero libre el que robó.

La historia de una detención que llevó a cabo un efectivo de la Policía de la Ciudad se viralizó en redes sociales y generó un montón de opiniones y críticas.

En las imágenes puede verse al uniformado reducir en el piso a un delincuente, pero lo que generó una gran cantidad de comentarios fue que atrás del apresado aparece una persona y sin importarle la presencia del efectivo, le quita las zapatillas.

El hecho ocurrió en la zona sur de la Capital Federal y dos hipótesis se plantearon sobre esta situación.

La primera fue que un delincuente le roba las zapatillas a otro asaltante que está reducido, mientras que la segunda opción es que quien sustrae el calzado es una víctima que lo único que hace es recuperar ese par.

Esta última es la que más fuerza cobró, sobre todo porque el que sustrae las zapatillas grita algo como indignado y justificando su determinación.

De todas maneras, nuevamente se cuestionó el accionar de la Policía de la Ciudad por el hecho de que los uniformados no se desplacen en binomios y lo sigan haciendo en forma individual.