
En la intersección de las calles Casacuberta y Pasaje Angaco, la vereda de un domicilio lleva varios años con un trozo de varilla de construcción que asomo desde un intento de carpeta de concreto mal realizado y que representa un peligro real para quienes caminan ya que el fierro no se aprecia y suele provocar tropezones o rotura de calzados.
A metros de la vivienda hay un jardín de infantes y también funcionan una escuela primaria y secundaria, con lo cual no hay ninguna duda de que un estudiante puede resultar herido por la negligencia del dueño de la vivienda.
El objeto de la nota es advertir sobre la existencia de la varilla para evitarla e informarle a quien haya sido víctima de alguna lesión o daño que puede demandar al municipio de Avellaneda y al dueño de la vivienda.
