Corrientes: Femicida viajó desde Chaco para matar a su ex mujer

cuchillo-femicidioUn hombre de 47 años hizo el trayecto de una provincia a otra únicamente para asesinar a su ex mujer de 39 años y madre de sus seis descendientes. La ultimó a puñaladas en el patio de su casa. Vecinos de la cuadra de la capital correntina lo atraparon y quedó detenido.

Un hom­bre que via­jó des­de la pro­vin­cia de Cha­co a la ca­pi­tal de Co­rrien­tes ma­tó el jueves de múl­ti­ples pu­ña­la­das a su ex mu­jer y ma­dre de sus seis hi­jos, en el pa­tio de su propia ca­sa.

La víc­ti­ma del nue­vo ca­so de fe­mi­ci­dio fue iden­ti­fi­ca­da co­mo Gla­dis Be­a­triz Re­bo­le­do, de 39 años.

Por el cri­men re­sul­tó de­te­ni­do Car­los de Je­sús Bri­zue­la, de 47 años. Lo atra­pa­ron efec­ti­vos de la co­mi­sa­ría 12° con ayu­da de ve­ci­nos cuan­do in­ten­ta­ba ale­jar­se del es­ce­na­rio del de­li­to.

De acuer­do a fuen­tes po­li­cia­les con­sul­ta­das por Dia­rio Epo­ca de Corrientes, po­co an­tes del me­dio­día Bri­zue­la lle­gó des­de la ve­ci­na pro­vin­cia don­de tie­ne su do­mi­ci­lio. Al lle­gar a la ca­sa que Re­bo­le­do ha­bi­ta­ba jun­to a su ma­dre y otros fa­mi­lia­res, en ca­lle Ga­to y Man­cha sin nú­me­ro, a tres cua­dras al Oes­te de ave­ni­da J.R.Vi­dal del ba­rrio Vi­lla Pa­to­no, pi­dió “ha­blar” con su ex con­cu­bi­na. La char­la se trans­for­mó en una dis­cu­sión muy fuer­te por la ex sue­gra de Bri­zue­la.

Ve­ci­nos, al tan­to del al­ter­ca­do, die­ron avi­so a la Po­li­cía ya te­mien­do que la si­tua­ción pa­sa­ra a ma­yo­res. En la par­te pos­te­rior de la vi­vien­da, pre­ci­sa­men­te en un pa­tio, el hom­bre ex­tra­jo de la cin­tu­ra un cu­chi­llo ti­po car­ni­ce­ro de man­go blan­co y co­me­tió el ata­que fu­ri­bun­do.

El au­tor del cri­men prac­ti­có una fu­ga fa­lli­da an­tes de ser al­can­za­do y re­du­ci­do a po­ca dis­tan­cia. En el tra­yec­to arro­jó el cu­chi­llo so­bre el sue­lo, en una zo­na don­de exis­te un mi­ni­ba­su­ral.

Ve­ci­nos co­men­za­ron a aglo­me­rar­se pi­dien­do au­xi­lio pa­ra la mu­jer que es­ta­ba to­da­vía con sig­nos vi­ta­les, de­san­grán­do­se.

Según narraron, la pareja tenía 6 hijos en común. Pero en el momento del ataque solo se encontraban uno de 10 y otro de 7 años.

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