Lanús:Asaltan y asesinan a una enfermera

Apareció sobre una cama, atada, amordazada y con el rostro destrozado, en su casa de Lanús. La víctima fue agredida por tres delincuentes, quienes saquearon el lugar y luego se fugaron. Uno de los hampones sería un sobrino de la mujer.

El cadáver de una enfermera de 49 años apareció sobre una cama, amordazado, atado de pies y manos, y con 19 cuchilladas, en un escalofriante asesinato sucedido en la vivienda de la víctima, en la localidad bonaerense de Monte Chingolo, en el partido de Lanús. La mujer fue agredida con fines de robo por tres delincuentes que le sustrajeron numerosos objetos de valor y que ahora son buscados por los efectivos policiales.

Los voceros revelaron que el macabro hallazgo se produjo en las últimas horas de la tarde del domingo pasado en el interior de una finca situada en la calle Cavia al 1200, donde fue encontrado el cuerpo sin vida de Gladys Irén, de 49 años.

Trascendió que la infortunada víctima, que yacía amordazada sobre una cama, tenía las manos y los pies atados con cordones.

La enfermera presentaba 19 puñaladas, que le habían ocasionado la muerte. La mayoría de los puntazos estaban en el rostro.

Aparentemente, los marginales entraron a la casa, golpearon a Gladys, la ataron a la cama y después le ocasionaron los cortes para que muriera desangrada.

Pero, antes de torturarla, para impedir que se escucharon los gritos, los peligrosos hampones resolvieron colocar música, a elevado volumen, entre las 19 del sábado y 2 del domingo pasados.

Vecinos del lugar narraron que, precisamente en la madrugada del domingo, lograron ver a dos sujetos y a una muchacha que salían de la finca de la enfermera.

Carlos Rubén Irén, uno de los siete hermanos de Gladys, dialogó con Crónica y dijo que de la casa habitada por su hermana faltaban una bicicleta, una cámara fotográfica, una computadora, dos aparatos de telefonía celular y una suma de dinero.

Gladys se desempeñaba desde hacía 30 años en el Hospital Vecinal de Lanús.

Trascendió que la víctima tenía que concurrir a trabajar en la jornada del domingo. A raíz de su ausencia, sus compañeros del centro asistencial se comunicaron telefónicamente con una vecina de la enfermera.

Esta mujer, al ser informada de la situación, ingresó muy preocupada al inmueble habitado por la víctima, oportunidad en la que observó el cuerpo destrozado.

Ahora los pesquisas policiales destinados en la comisaría de Monte Chingolo (6ª de Lanús) procuran esclarecer lo sucedido.

Los investigadores opinan que Irén conocía a los criminales. Al respecto, tanto los miembros de la seccional como los parientes de la mujer opinan que uno de los autores del asesinato sería un sobrino de Gladys. Este individuo, de 32 años, se habría fugado el 24 de julio pasado de la cárcel de Campana.

En esta causa, que fue caratulada “Homicidio”, tomó intervención el doctor Domingo Ferrari, Fiscal de la Unidad Funcional Nº 8 del departamento judicial de Lomas de Zamora.

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