La propuesta ahora conocida como X pretende emular el funcionamiento de WeChat y busca revolucionar el entorno social media.

Twitter ha dejado de ser la red social del pájaro azul. La plataforma ahora se llama “X” y adoptó como logotipo una equis que anuncia la materialización de un proyecto que Elon Musk comenzó a gestar desde hace más de dos décadas. El cambio de imagen ya es visible en la versión web del servicio.

El movimiento era previsible. Sin previo aviso, en abril pasado Twitter Inc. desapareció tras fusionarse con X Corp., una empresa privada cuya compañía matriz es X Holding Corp. Tras la adquisición de Twitter, en octubre pasado, el empresario sudafricano aseguró que la red social cofundada por Jack Dorsey sería la base para lanzar “su aplicación para todo”. La propuesta que ahora conocemos como X pretende emular el funcionamiento de WeChat. “Twitter probablemente acelerará (el lanzamiento de) X de 3 a 5 años”, dijo Musk.

A mediados de mayo, cuando Linda Yaccarino fue nombrada como CEO de Twitter, Elon Musk aseguró que una de las tareas más importantes de la nueva directora era liderar el avance de “X/Twitter”. La líder ejecutiva de la plataforma aseguró en un tuit que “durante años, tanto los fanáticos como los críticos han empujado a Twitter a soñar más grande, innovar más rápido y alcanzar nuestro gran potencial. X hará eso y más. Ya comenzamos a ver que X toma forma en los últimos 8 meses a través de nuestros lanzamientos rápidos de funciones, pero apenas estamos comenzando”.

Yaccarino reiteró que la transformación de Twitter en X tiene la capacidad para cambiar las reglas de la comunicación digital en todo el mundo. La ejecutiva definió a X como “el estado futuro de la interactividad ilimitada, centrada en audio, video, mensajería, pagos/banca, creando un mercado global para ideas, bienes, servicios y oportunidades”.

Twitter se convierte en X, el sueño de Elon Musk se hace realidad

El rebranding de Twitter es un punto de inflexión alrededor del proyecto de Musk que nació hace casi 25 años y mucho tiene que ver con PayPal. En marzo de 1999, el magnate fundó X.com, un portal que tenía la intención de centralizar servicios de banca online, tarjetas de crédito, compras online, inversiones y préstamos.

Entonces se presentó como un sistema financiero en línea desde el cuál se podrían gestionar todo tipo de transacciones en tiempo real. “Si se solucionan todas las razones por las que un consumidor retira dinero del sistema, entonces [X.com] será el lugar donde esté todo el dinero, y eso la convertiría en una empresa multimillonaria», explicó en aquel momento su fundador.

La empresa financiera terminó asociándose con Confinity, una startup de criptografía para hacer pagos con aparatos móviles PDA. La alianza dio como resultado la creación de PayPal, servicio que fue vendido con todos sus activos en 2002 a eBay en un acuerdo de 1,500 millones de dólares. En 2017, Elon Musk recuperó el dominio X.com tras comprarlo a PayPal argumentando “un gran valor sentimental” alrededor de la propiedad digital que fue relanzada.

El dominio por el que Musk habría pagado 5 millones de dólares, según TechCrunch, ahora está disponible para compra. Mientras tanto, Twitter está cambiando en todos los niveles y cada vez estamos más cerca de ver una red social completamente diferente a la que llegó al mercado en marzo de 2006.