Un oficial de la Metropolitana fue baleado en su mano por parte de un delincuente, que hacía extrañas maniobras con un vehículo sobre la Avenida Fernández de la Cruz. El hampón quedó detenido.
Un oficial de la Policía Metropolitana fue baleado en su mano por un delincuente que terminó detenido y también herido, tras un tiroteo en el barrio de Nueva Pompeya, informaron fuentes de la fuerza.
El hecho ocurrió en la mañana del miércoles, alrededor de las 8, cuando dos efectivos porteños realizaban patrullajes de prevención en el mencionado barrio de la Capital Federal.
Fuentes policiales informaron que los oficiales observaron que el conductor de un auto Renault hacía maniobras inadecuadas sobre la Avenida Fernández de la Cruz, por lo que detuvieron la marcha de ese vehículo.
El personal solicitó los documentos correspondientes del hombre, quien descendió del rodado, extrajo un arma de fuego y amenazó a los efectivos.
“Quedate quieto o te mato”, dijo el conductor y efectuó un disparo que impactó en la mano de uno de los policías, agregaron las fuentes.
Ante esa situación, el compañero repelió la agresión, hirió al delincuente de tres balazos y lo detuvo en el lugar.
El policía llamó al Servicio de Atención Médica de Emergencia (SAME) que trasladó al efectivo herido al Hospital Churruca Visca, donde quedó internado fuera de peligro.
Además, los médicos llevaron al agresor al Hospital Penna, donde se encontraba detenido y atendido con custodia policial.
De acuerdo a los voceros, a través del Centro Único de Comando y Control se estableció que el auto en el que iba el hombre, de 47 años, tenía pedido de secuestro por robo desde el 16 de julio de 2012.
Personal policial también secuestró una pistola Bersa mini Thunder calibre 9 milímetros con inscripción de la Policía bonaerense y un equipo de comunicación con la frecuencia de esa fuerza.
El detenido quedó a disposición del juez Santiago Quian Zavalia, a cargo del Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción 32 que dispuso que las pericias y los elementos secuestrados queden bajo la jurisdicción de la Gendarmería Nacional y sean trasladados a la comisaría 34ta. de la Policía Federal.