La investigación se había iniciado cuando una mujer denunció que viajaba en un taxi y al llegar a su destino el conductor la agredió utilizando un aerosol con gas pimienta, la obligó a bajar del vehículo y le robó sus pertenencias. Policías lograron comprobar que algunas de las tarjetas de crédito que le habían sustraído a la pasajera fueron utilizadas en distintos negocios de la Ciudad de Buenos Aires.
Un taxista acusado de haber cometido al menos ocho robos a pasajeras, a quienes atacaba utilizando gas pimienta y una picana eléctrica para apoderarse de su dinero y objetos de valor, fue detenido por la Policía Federal en el barrio porteño de Mataderos.
Las imágenes obtenidas en las grabaciones de las cámaras de seguridad de los locales mostraron, entre las personas que realizaron compras en esos comercios, a un hombre con dos tatuajes y un piercing en una oreja y otro en la nariz, como describió al taxista la damnificada por el robo.
Con estas evidencias y la declaración de testigos se determinó que el sospechoso conducía un taxi, vivía en las inmediaciones de estos comercios y se movilizaba en un Fiat Siena, cuya patente también fue identificada por los investigadores.
Con la orden judicial, los policías realizaron dos allanamientos, uno de ellos en una vivienda de la calle Martiniano Leguizamón al 1900 y el restante en un hotel ubicado en Rodó al 6100, donde se detuvo al acusado, un hombre de 37 años, según dijeron las fuentes consultadas.
En esos lugares se secuestraron varios frascos de gas pimienta, una cartera, tarjetas de débito, una cédula de identidad a nombre de una mujer, un teléfono celular, dos juegos de llaves y facturación que acredita la realización de compras en distintos supermercados.
Fuentes de la investigación destacaron que de los estudios realizados se estableció que el acusado habría cometido «al menos ocho robos de similares características» a otras tantas mujeres, por lo que se solicitó la cooperación de personas que hayan sido víctimas de esta clase de delitos que asistan al Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción 8, a cargo de la Jueza Yamila Bernan, quien interviene en el hecho.