Rubén pinta desde hace 50 años y un diagnóstico negativo de Tita su perra, lo llevó a rematar sus pinturas para tratar de salvarle la vida a su compañera de vida.
“Mi misión en este momento de mi vida es salvar a Tita, que es el amor de mi vida”. Así arranca el mensaje que Rubén, un jubilado del Cerrito Sur, difundió en redes tras enterarse que su perrita tiene hepatitis y necesita hacer un tratamiento muy específico.
Según contó el hombre a Mi8, al ser jubilado con la mínima no cuenta con los recursos para costear los medicamentos y estudios que precisa Tita, que tiene doce años. Entonces, lo que ideó fue vender sus cuadros para poder reunir los fondos para garantizar sanación al animal. “Lo que me den me sirve. Estoy muy angustiado y preocupado”, aseguró en el posteo en el que comparte una foto de Tita y de sus cuadros, muchos dedicados «a la mujer».

“Estoy con mucha tristeza inmensa. La Tita está conmigo desde que es cachorrita, estaba en la calle. Tengo que tratar de salvar a mi perra como sea, no quiero que sufra”, suplica Rubén, que contó que prontamente tiene que hacerle una ecografía a Tita y le cuesta $50.000. “Su insuficiencia hepática no sabemos en qué puede devenir”, agregó, agradecido por las atenciones de su veterinario.
“Yo remato a voluntad, lo que puedan darme por mis cuadros va a servir. El tratamiento va a llevar tiempo. Yo necesito salvarle la vida a mi compañera de vida”, reforzó el vecino, que jura haber pintado toda la vida, “obras originales y copias”.
“Pintar, pinté toda mi vida. Me costó insertarme en el mercado, no es fácil. Pero yo te pinto de todo, incluso te hago copias. Hace más de 50 años que pinto cuadros”, relató sobre su trayectoria artística.
Quienes quieran comprarle cuadros a Rubén, sólo se tienen que comunicar con él a su teléfono: 223 5830659
Fuente: Mi8