La expresión del ex presidente contra el ex intendente quilmeño y «los inventos que traen a la Provincia» sucedió en el almuerzo PRO de hace una semana, en pleno estallido con Carrió. Molina estuvo en la reunión con peronistas disidentes en apoyo a Larreta y Santilli donde hubo dardos a Macri y Vidal.
El ex intendente de Quilmes, Martiniano Molina, se convirtió en uno de los blancos internos de Mauricio Macri, que literalmente lo destrozó: lo puso como ejemplo de los «inventos» que «hay que dejar de traer a la provincia de Buenos Aires» y fue terminante al acusarlo de «no saber gobernar» cuando tuvo su oportunidad y la desperdició.
La cita en la que el líder PRO se refirió así a Molina fue hace una semana, cuando los dirigentes más importantes del PRO se reunieron a almorzar en Happening de Costanera tras el estallido en Juntos por el Cambio por las declaraciones de Elisa Carrió. Estuvieron presentes en ese cónclave Horacio Rodríguez Larreta, Diego Santilli, Cristian Ritondo y Patricia Bullrich, entre otros.
Pese a que las versiones indican que en el almuerzo buscaron terminar con la crisis interna, al menos desde el bando PRO, parece ser que Macri tenía alguna deuda pendiente y que, además, planificó darla a conocer con detalles.
Es que según publicó un periodista que sigue los caminos internos del PRO en Perfil, tras las referencias a los dichos de Carrió y los descargos de sus víctimas, algunas de ellas allí presentes, Macri se metió en el armado político y pidió dejar de traer “inventos a la Provincia de Buenos Aires” y colocó como ejemplo de tal descalificación Martiniano Molina, a quien refirió como «el chef que no sabía gobernar”.
“Hay que capacitar a los candidatos a intendentes”, clausuró Macri, dando a entender también que lo que sucedió con Molina, que gobernó Quilmes entre 2015 y 2019 pero no pudo revalidar su gestión y perdió contra el Frente de Todos, fue que no estaba formado para el trabajo.
Cabe recordarse que el ex jefe comunal y ex jugador de handball fue parte de un encuentro de dirigentes del PRO con peronistas disidentes que generó polémicas y cruces en el partido de Macri, justamente porque allí se filtró que hubo críticas contra el ex presidente y María Eugenia Vidal.
El dato es que esos dirigentes peronistas opositores, igual que Molina, apoyan la candidatura de Horacio Rodríguez Larreta a presidente y de su afil Diego Santilli para la provincia de Buenos Aires, cuyo origen porteño invita a pensar si no se trata de otro más de los «inventos» que Macri no desea.
Esa situación generó durísimas respuestas de Ritondo y dirigentes de su entorno, que luego devinieron en un intento de desmarque de los macristas que estuvieron en el encuentro de la polémica, que hicieron saber al portal Nueva BA que, según ellos, no hubo disparos contra Macri y Vidal sino «autocrítica» general a «la política».
Fuente: Política Argentina