Un nuevo asesinato en Lanús, deja en evidencia la falta de prevención y la mala gestión del intendente Julián Álvarez, que posee el municipio explotado de delitos y droga, un combo que va a generar delitos graves y muchas muertes, pero parece que las autoridades están en otro canal.

Un hombre, de 38 años, fue acuchillado para ser abandonado en la vía pública por dos individuos, quienes se escaparon en un coche, aunque uno de los sujetos finalizó detenido tras una persecución.

La víctima fatal fue identificada, en forma oficial, como Fabio Alejandro Garro, quien fue asesinado ayer, cuando dos individuos, que se movilizaban en un VW Fox azul, lo abandonaron herido de muerte en una sala de primeros auxilios por un hombre y luego trasladado por SAME al hospital vecinal, en el camino huyeron pero en el cruce del Camino General Belgrano y Suipacha, en Gerli, partido de Lanús, fueron detectados por el Comando Patrulla que comenzó a perseguirlos.

Al arribar a la esquina de Cangallo y Gobernador Alberto Barceló, consiguieron interceptarlos y apresaron a uno de los ocupantes, de 38 años, quien pretendió escapar, identificado como Ariel Julio Rodríguez. En el interior del Fox fue incautada una pistola Ballester Molina 11.25, con la numeración limada por lo que fue detenido en la seccional 2ª, por “encubrimiento y tenencia ilegal de arma de guerra”.

Mientras tanto, Garro fue conducido a un hospital, donde finalmente perdió la vida y peritos de la Policía Científica determinaron que presentaba heridas de arma blanca en la región torácica.

Según el expediente, Garro fue acuchillado por una mujer, de 27 años identificada como N.N. Celeste o Celeste Alexandra Mansilla y que fue aprehendida, en Villa Corina, partido de Avellaneda aunque se desconocen las razones del asesinato que es investigado por la Unidad Funcional 6 de los tribunales de Avellaneda – Lanús, a cargo de Martín Darío Rodríguez.

Aunque las autoridades judiciales y policiales omitieron dar más datos de la víctima, se trataba de un conocido delincuente de la zona, dedicado al robo y la venta de drogas, cuando no participaba de la barra brava de un conocido club de Avellaneda, lo curioso es que a pesar de todos los delitos y causas se encontraba en libertad.