Se trata de un empleado con más de 25 años en la cadena de supermercados con más contagios del AMBA. Sus compañeros dijeron que «no hubo denuncia en la ART» y aseguraron: «nos están matando».
Un trabajador de COTO falleció en la jornada de ayer como consecuencia de infectarse de Coronavirus. Su compañera, además se encuentra actualmente en aislamiento, cursando un cuadro respiratorio y esperando el resultado del hisopado que le realizaron.
El empleado solía desempeñar sus tareas en el sector de carnes de la sucursal 22, ubicada en Avenida Elcano 3002, del barrio porteño de Belgrano. La infección se presentó cuando estaba cubriendo un puesto en la tienda 235, de Humberto Primo 165, en la localidad bonaerense de Quilmes.
En un sentido comunicado, sus compañeras y compañeros relatan parte de lo sucedido: «Fue a una guardia para ver qué era lo que tenía y nunca más volvió».
A este hecho lamentable se suman otros hechos no menos dolorosos, como que no hubo denuncia en la ART y, según detallan «el seguro privado Certeza pretende cobrar por el crematorio a sabiendas que no dará servicio de velatorio por estar prohibido y debe cremar según lo reglamentado».
Los trabajadores insisten en visibilizar el cuadro completo de las irregularidades que comete la empresa cuando oculta los casos, se niega a los cierres para una desinfección apropiada, obliga a trabajar a empleados con síntomas, los somete al silencio si se quejan por medio de amenazas y aprietes.
«Está perdida hace visible todas las falencias que hay con los casos de Covid-19», aseguran. «Nos están matando», le dijeron a InfoGremiales.
«Hoy perdimos a un delegado de oficio que hace más de 25 años que está en la empresa», lo recuerdan.
También denuncian que su compañera quedó a la deriva: «Ni siquiera existe el respeto de darle las condolencias a su mujer que quedó en cuarentena y cursa, no solo la angustia, sino también un cuadro respiratorio esperando la respuesta del hisopado».