El hecho sucedió en San Luis. La decisión fue tomada por el Obispado puntano al encontrar «irregularidades en el ejercicio de las actividades eclesiásticas».
El Obispado de San Luis confirmó hoy la expulsión del presbítero Miguel Ángel Santurio de la diócesis local por considerar que existieron irregularidades en el ejercicio de las actividades eclesiásticas, luego de ser acusado por tres mujeres de supuestos «manoseos y abusos sexuales».
El Obispado puntano señaló a través de un comunicado que “la Santa Sede” resolvió “la expulsión” de Santurio, porque “no se encuentra en comunión con la Iglesia Católica Apostólica Romana presidida por su Santidad, Benedicto XVI, y representada en la diócesis local por Monseñor Pedro Daniel Martínez”.
Ante esta situación, Santurio “no posee ningún oficio o encargo pastoral de parte de la misma; ni tiene licencias o autorización para realizar ningún tipo de acto religioso o sacramental”, señala el comunicado.
Santurio fue acusado -en febrero de 2008- de supuestos ‘manoseos y abusos sexuales” contra tres mujeres de la ciudad de Puerto Iguazú en la provincia de Misiones, lugar al que se dirigió para fundar una congregación.
El religioso estaba en conflicto en esa época con quien era el Obispo de San Luis, monseñor Jorge Luis Lona, quien promovió en la Santa Sede un juicio canónico contra el sacerdote no solo por las acusaciones públicas realizadas en Misiones sino por otras causas internas de la igleisa, cuyos detalles no se revelaron.
Si bien la justicia penal de Misiones no encontró mérito para procesar a Santurio, la Santa Sede lo encontró responsable de irregularidades en el ejercicio de su sacerdocio por lo que resolvió expulsarlo de su estado clerical.
