El alarmante dato surge del Registro Nacional de Reincidencia y Estadística Criminal y Carcelaria. La cifra se mantiene estable desde hace una década.
Hasta el viernes 23 de agosto de este año, los pedidos de captura vigentes de la Justicia argentina alcanzaban a 105.249 personas, según información brindada por el Ministro de Seguridad que publica en su edición de hoy el diario Clarín.
El dato surge del Registro Nacional de Reincidencia y Estadística Criminal y Carcelaria, que trabaja con la Justicia y las autoridades policiales cuando deben averiguar si una persona sufre de impedimentos legales o restricciones. El propio Registro consulta además a la Dirección Nacional de Migraciones y al SIBIOS (Sistema Federal de Identificación Biométrica para la Seguridad) para la confección de esta base de datos.
La alarmante cifra, compuesta por reos fugados de las cárceles y ciudadanos que no responden al llamado de la Justicia- se ha mantenido estable en la última década, con apenas unos cuatro mil sumados desde el 2001.
En ese año, el número de prófugos, según el sistema informático INGE, de la División Índice General de la Policía Federal, eran 101.171. Por su parte, en 2004, tras la creación de la Unidad Operativa de Ejecución de Capturas, la Policía Bonaerense contabilizaba alrededor de 52.000.
Este último martes, 13 presos de la cárcel de Ezeiza, considerado el complejo penitenciario más seguro del país, se fugaron tras realizar un boquete, provocando la caída del polémico director del Servicio Penitenciario Federal (SPF), Víctor Hortel.
El ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Julio Alak, nombró como nuevo titular del SPF a Alejandro Marambio, cuestionado por denuncias de abusos en su anterior mandato, entre 2007 y 2010.
